Macron reclama a Teherán que “libere sin demora” a los otros tres ciudadanos franceses detenidos en Irán
MADRID, 12 (EUROPA PRESS)
El ciudadano francés Louis Arnaud, detenido en Irán en septiembre de 2022 durante las protestas tras la muerte de la joven kurdo-iraní Mahsa Amini y condenado a cinco años de cárcel por difundir propaganda antigubernamental y socavar la seguridad nacional, ha llegado este jueves a un aeropuerto situado en los alrededores de París tras ser liberado por las autoridades iraníes.
Arnaud ha llegado al Aeropuerto de París-Le Bourget, al noreste de la capital francesa, donde ha sido recibido por el ministro de Exteriores, Stéphane Séjourné, según las imágenes difundidas por la cadena de televisión BFM TV. Tras ello, ha dado un abrazo a sus padres, desplazados al aeródromo para recibirlo tras su liberación.
Horas antes, el presidente francés, Emmanuel Macron, había anunciado la liberación de Arnaud y confirmó que llegaría este mismo jueves a Francia “tras haber estado encarcelado demasiado tiempo en Irán”. Asimismo, dio las gracias a los “amigos omaníes” y “a todos los que han trabajado para lograr este feliz desenlace”, según un mensaje publicado en su cuenta en la red social X.
El mandatario pidió además a Teherán que “libere sin demora” a los otros tres ciudadanos franceses detenidos en el país asiático. “Esta noche pienso también en Cécile (Kohler y su marido), Jacques (Paris) y Olivier”, ha expresado, en referencia a una persona cuya identidad completa no se ha hecho pública. Kohler y Paris están acusados de pertenecer a los servicios de Inteligencia de Francia.
Arnaud, que fue detenido en septiembre de 2022 poco después de que estallaran las protestas por la muerte bajo custodia de Amini después de ser detenida por la ‘policía de la moral’ en Teherán por supuestamente llevar mal puesto el velo, se encontraba de viaje por la región tras haber visitado otros países, como Turquía o Armenia.
La académica franco-iraní Fariba Adelkhah, detenida en 2019 y condenada en mayo de 2020 a cinco años de cárcel, regresó a Francia en octubre de 2023, mientras que en mayo de ese año fueron liberados el franco-irlandés Bernard Phelan, condenado a seis años y medio de prisión tras ser detenido durante las citadas protestas, y Benjamin Brire, sentenciado a ocho años en prisión tras ser arrestado en mayo de 2020 por “espionaje”.
Recientemente, París denunció la “política de rehenes” de Irán y el “continuo chantaje” ejercido por las autoridades iraníes en relación con la detención sus cuatro ciudadanos, responsabilizándoles de “su suerte y trato. Tras ello, Teherán criticó la postura “intervencionista” e “inapropiada” del Elíseo, aseverando que estas personas fueron arrestadas a partir de “pruebas sólidas”.
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