MADRID, 7 (EUROPA PRESS)
Históricos dirigentes de ETA como Xabier García Gaztelu, alias ‘Txapote’, y José Javier Arizkuren Ruiz, ‘Kantauri’, podrían ser excarcelados ya el próximo 2025, adelantando su liquidación de condena al descontarse los años en prisión en Francia gracias a la aplicación de la reforma de la ley orgánica 7/2014, actualmente en trámite parlamentario en el Senado.
Félix Alberto López de Lacalle, ‘Mobutu’, o Juan Carlos Iglesias Chuzas, ‘Gadafi’, son otros de los más de 40 etarras beneficiados por esta reforma de la ley orgánica 7/2014 sobre intercambio de información de antecedentes penales y consideración de resoluciones penales en la Unión Europea, entre ellos siete que podrían ser excarcelados “en los próximos meses”, según un informe de la Asociación Víctimas del Terrorismo (AVT) consultado por Europa Press.
Fue la AVT quien alertó de esta situación en 2022 y este lunes ha pedido que la modificación legal sea tumbada en el Senado, después de que pasara los trámites parlamentarios en el Congreso con el voto favorable de PP y Vox. Otras asociaciones como Dignidad y Justicia (DyJ) han pedido explicaciones al considerar que lo ocurrido “no tiene disculpa”.
TAMBIÉN ACORTA PLAZOS PARA TERCEROS GRADOS
En 2022, la AVT ya denunció los “planes” del Gobierno de Pedro Sánchez y avisó en un dossier que los etarras beneficiados por los años cumplidos en Francia se podrían descontar 7,8 años de media por preso, lo que “no sólo acortaría la estancia en prisión sino los plazos para que accedieran al tercer grado y a la libertad condicional”.
Entre los nombres propios que figuraban en listado de la AVT destacaba ‘Txapote’, el asesino de Gregorio Ordóñez, Fernando Múgica o Miguel Ángel Blanco, entre otros. Este terrorista podría descontar seis años y nueve meses de su condena, por lo que vería adelantada su liquidación prevista para 2031 y sería excarcelado en 2025, el próximo año.
José Javier Arizkuren Ruiz, ‘Kantauri’, es otro de los etarras con varios delitos de sangre, entre ellos el asesinato de Alberto Jiménez Becerril y su mujer Ascensión García, que vería rebajada su condena al descontar siete años y ocho meses, con lo que su excarcelación podría adelantarse a 2025, según los cálculos de la AVT.
También figuraban otros históricos jefes etarras con múltiples asesinatos a sus espaldas como ‘Mobutu’, que fue el que más años cumplió en el país galo al sumar 23 años y un mes encarcelado, o ‘Gadafi’, que pasó en prisión en Francia cinco años y siete meses, por lo que su excarcelación pasaría de 2038 a 2033.
Irantzu Gallastegi Sodupe, alias ‘Amaia’ y pareja de Txapote, es otra de las presas que mejoraría su situación por la reforma legal de la ley orgánica 7/2014 sobre intercambio de información de antecedentes penales y consideración de resoluciones penales en la Unión Europea. En concreto, podría salir de prisión en 2026, en lugar de la fecha prevista de 2032.
‘ANBOTO’, OLARRA GURIDI O ‘KARAKA’
En la lista difundida por la AVT en 2022 figuraban otros históricos etarras como José María Arregui Erostarbe, alias ‘Fiti’, recientemente excarcelado tras cumplir 32 años de condena. María Soledad Iparraguirre, ‘Anboto’, y Juan Antonio Olarra Guridi son otros de los terroristas con múltiples condenas que verían reducida sus penas en 15 años y siete años y diez meses, respectivamente.
Figura también Jon Bienzobas, alias ‘Karaka’, autor del asesinato de Francisco Tomás y Valiente, que podría computar 18 años y tres meses de cárcel por los años cumplidos en Francia, así como Dolores López Resina, que podría descontarse 17 años.
El listado de etarras incluye también a Andoni Otegi, Lexuri Gallastegi, Manex Zubiaga, Íñigo Vallejo Franco, Ainhoa García Montero o José Lorenzo Ayestaran, así como a otros miembros de ETA como Juan Luis Rubenach Roig, Jon Joseba Troitiño, Beinat Aguinagalde, Joanes Larretxea Mendiola, Liher Artexabaleta o Alaitz Aramendi.
Otros de los etarras son Gorka Palacios y Jurdan Martitegi, que podrían ver reducida sus amplias condenas en 14 años y en cinco años, respectivamente, según el listado de la AVT que incluye también a casi 20 presos de ETA sin delitos de sangre y condenados por otros delitos de terrorismo.
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