MADRID, 12 (SERVIMEDIA)
Cumplir el objetivo de la Cumbre del Clima del año pasado, conocida como COP28 y celebrada en Dubái (Emiratos Árabes Unidos), de triplicar la producción de energía renovable hasta 2030 requiere de dos billones de dólares anuales de inversión, el doble que la actual.
Esa es la proyección realizada por Climate Analytics, un instituto de ciencia y políticas climáticas con sede en Berlín (Alemania), en un análisis difundido este martes.
El informe indica que hacen falta ocho billones de dólares para nuevas energías renovables y cuatro billones para infraestructuras de red y almacenamiento con el fin de alcanzar la meta de triplicar la producción renovable en 2030.
Además, deben movilizarse 100.000 millones de dólares anuales en financiación climática para el despliegue renovable en África subsahariana (cinco veces los niveles de inversión actuales) y garantizar el acceso a la energía para todos y alinear la región con el objetivo de la COP28.
“Dos billones de dólares al año suena como un coste, pero en realidad es una elección. Estamos listos para invertir más de seis billones de dólares en combustibles fósiles durante esta década, más que suficiente para cerrar la brecha de inversión que se triplica. Ante esta elección, me decantaría por la opción más segura y de mejor valor: las energías renovables”, según Neil Grant, autor principal del informe y experto en análisis climático.
El informe calcula la rapidez con la que las diferentes regiones deben actuar para triplicar las energías renovables mundiales en función de las capacidades actuales y las necesidades futuras.
REGIONES
La capacidad renovable en el África subsahariana debe multiplicarse rápidamente por siete (el doble de la media mundial) debido a la histórica falta de inversión y a las necesidades de acceso a la energía.
Se prevé que los países de la OCDE dupliquen sus energías renovables para 2030, pero necesitan triplicarlas. Acelerar la acción cerraría el 60% de la brecha mundial entre la capacidad prevista en 2030 y el objetivo de triplicar las energías limpias.
“La OCDE necesita triplicar las energías renovables, pero actualmente está muy lejos del objetivo. Los países de la región que afirman ser líderes climáticos deben predicar con el ejemplo, no solo aumentando las energías renovables en casa, sino ayudando a otras regiones que necesitan financiamiento para contribuir al objetivo de triplicación”, apunta Claire Fyson, coautora del informe y jefa de políticas de Climate Analytics.
Por su parte, Asia necesita escalar un poco más rápido que la OCDE, casi cuadruplicando su capacidad renovable a finales de esta década. Es la única región que, en general, está en camino de alcanzar el objetivo de triplicar la producción renovable, impulsada por las políticas de China e India.
Sin embargo, la gran cantidad de gasoductos en estos dos países corre el riesgo de dejar activos varados o ralentizar la transición. Dado que las energías renovables crecerán con fuerza en la región, no se necesitan nuevas plantas de combustibles fósiles y deben evitarse, según Climate Analytics.
El informe concluye que las energías renovables deben seguir creciendo con fuerza más allá del final de esta década, quintuplicándose para 2035 en relación con 2022 para limitar el calentamiento global a 1,5 grados respecto a la era preindustrial.
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