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Susana Rodríguez y Dani Molina encabezan otra celebración paralímpica en el triatlón

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PARÍS, 2 (del enviado especial de EUROPA PRESS, Ramón Chamorro)

El triatlón español repitió este lunes en el Puente de Alejandro III su fiesta paralímpica de hace tres años en Tokio con la conquista de cuatro medallas en los Juegos de París, con oros para Susana Rodríguez y Dani Molina, plata para Marta Francés y bronce para Nil Riudavets, que impulsaron a España en el medallero de la cita.

En la bahía de Odaiba, el triatlón español para deportistas con discapacidad brilló hace tres años, y a los pies del río Sena, lo volvió a hacer, con el añadido de que de sus cuatro medallistas de 2021, sólo repitió una Susana Rodríguez descomunal.

El debutante Dani Molina confirmó los favoritismos y por fin cerró el círculo tras muchos años de espera, mientras que los también ‘rookies’, pero más inexpertos, Marta Francés y Nil Riudavets cerraron la actuación con una plata y un bronce para hacer que España ya roce la veintena de metales. El premio pudo ser aún mayor porque Eva Moral, bronce en Tokio, se quedó a siete segundos del podio.

La fiesta en la meta situada en el Puente de Alejandro III la comenzó Dani Molina que en estreno en este deporte en unos Juegos, no a nivel paralímpico porque ya estuvo como nadador en Atenas 2004, no falló en el día que soñaba desde hace tanto tiempo.

Su categoría, la PTS3 para deportistas con discapacidad física, no había entrado en el programa ni de Rio 2016 ni de Tokyo 2020. Era el mejor, pero ni él ni sus rivales tenían la oportunidad de mostrarse en unos Juegos Paralímpicos hasta Paris 2024. Su oro lo fabricó a fuego lento, culminándolo en su magnífica carrera a pie, su punto fuerte y donde firmó una gran remontada después de controlar bien a sus rivales tras el segmento de ciclismo.

El madrileño, cinco veces campeón del mundo, era el favorito en esta prueba, nueva en el programa para Paris 2024, una inclusión que por fin le permitió aspirar a lo único que faltaba en su enorme palmarés donde también hay seis oros europeos. Paralímpico en natación en Atenas 2004, cerró una larga espera del mejor modo posible, con un triunfo de mucha autoridad y que le permitió disfrutarlo en la recta de meta donde en primera fila se encontraba también SM la Reina Letizia, apoyando esta mañana a los triatletas.

Ya desde el principio, el triatleta español demostró su fortaleza. En las aguas del Sena se batió contra la corriente y sus rivales para salir en cabeza, aunque seguido muy de cerca por el neerlandés Nico van der Burgt, mientras que en el ciclismo, donde más puede sufrir, manejó bien la situación. Van der Burgt y el alemán Max Gelhaar le pasaron y se afanaron en intentar abrir la máxima distancia.

En el cambio a la carrera a pie esta era sola de 47 segundos, muy asequible para el madrileño, que es el mejor en esta especialidad de su categoría y que no escatimó esfuerzos. Superó a sus dos rivales casi al kilómetro y medio, se escapó y pudo disfrutar de la gloria paralímpica tras acabar su triatlón en 1:08.05, 38 segundos mejor que Gelhaar.

SUSANA RODRÍGUEZ Y SARA PÉREZ, DE PRINCIPIO A FIN

La siguiente gran alegría llegó en la otra prueba donde más opciones había, la de deportistas con discapacidad visual, en la que Susana Rodríguez demostró también por qué es la número uno como hizo en Tokio, acompañada en esta ocasión de Sara Pérez como guía.

Ni una peligrosa caída en junio pudo detener la ambición de ambas, sobre todo de la gallega. Ambas han formado una buena dupla y no dieron demasiadas opciones al resto de rivales, a las que dominaron y controlaron en los tres segmentos, ganando el metal dorado con más de dos minutos de ventaja.

Rodríguez y Pérez empezaron a amasar su triunfo tras salir de las aguas del Sena, con casi medio minuto de ventaja sobre la segunda clasificada. En el tandem, los miedos a una caída debían de desaparecer y las dos españolas se mostraron seguras, logrando que su renta se fuese ampliando por encima de los dos minutos.

Quedaba la carrera a pie y evitar cualquier tipo de desfallecimiento. La italiana Francesca Tarantello estaba lejos, pero no debía de haber relajaciones ni reservas. No las hubo, la distancia se mantuvo y Rodríguez y Pérez pudieron saborear también con tranquilidad su oro, el segundo de la gallega. En la prueba masculina, ‘Jota’ García y Diego Méntrida fueron novenos, mientras que Héctor Catalá, plata en 2021, no pudo terminar tras sufrir una caída junto a Carlos Oliver.

FRANCÉS Y RIUDAVETS COMPLETAN LA FIESTA, MORAL, A 7 SEGUNDOS

No pararon las alegrías con el Sena y con las calles parisinas invadidas por los triatletas de diferentes discapacidades, la clase PTS4, para deportistas con discapacidad física, terminó por dar las dos últimas alegrías, ambas labradas en un gran segmento final de carrera.

La primera fue por medio de Nil Riudavets. El menorquín, que ya era triatleta antes de que un accidente haciendo este deporte provocase la amputación de un brazo, firmó un sensacional final en su punto más fuerte para colgarse la medalla de bronce.

El balear marchaba sexto cuando hizo la última transición de la bicicleta a la carrera a pie. Tenía varios rivales por delante, pero les fue superando poco a poco a todos, librando incluso una batalla final por el tercer puesto con el francés Pierre-Antoine Baele. Alejandro Sánchez Palomero, bronce en Tokio, fue décimo.

Y mientras Riudaverts peleaba por hacerse con el último escalón del podio, Marta Francés, otra debutante que había esperado mucho para estar en unos Juegos tras rozar la clasificación para Tokio, también realizaban un gran final, en su caso para colgarse la plata.

De todos modos, al contrario que su compañero, la manchega fue casi siempre bien situada en los puestos delanteros y aunque salió quinta del segmento de natación, recuperó terreno en la bici y se puso en la tercera posición tras las británicas Hannah Moore y Megan Richter, que la aventajaban en alrededor de un minuto.

Francés encontró la energía necesaria para ir remontando al tiempo que Moore iba perdiendo fuelle y era superada por su compatriota y por la española, que entró feliz en la recta final para cruzar la meta con la bandera española que le había entregado el presidente del CSD, José Manuel Rodríguez Uribes.

Por su parte, en la categoría de silla de ruedas, la madrileña Eva Moral no pudo repetir su podio de hace tres años y finalizó en la cuarta posición a siete segundos de una nueva medalla de bronce y después de un ciclo en el que ha sido madre.

La española salió en la segunda posición tras el segmento de natación tras la australiana Laura Parker y después de un inicio en el que todas las participantes iban “bien pegadas” a la pared para evitar lo máximo posible la corriente. En la bici se quedó de inicio un tanto rezagada, pero luego fue remontando poco a poco para situarse cuarta antes del tramo final de carrera en silla de ruedas, donde tenía por delante a la canadiense Leanne Taylor. Moral la tuvo cerca, pero la norteamericana aguantó y se quedó con el bronce.

Otra debutante como Andrea Miguélez acabó quinta en PTS5 y se derrumbó de emoción y felicidad en la zona mixta, mientras que Lionel Morales (PTS2), al que se le fueron sus opciones en el agua, y Diego Lardón (PTS3), se llevaron diploma al ser sexto y séptimo. Jairo Ruiz, en sus Juegos de despedida, fue noveno (PTS5), y la veterana Rakel Mateo, décima en PTS2.


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