Considera que algunos estudios patronales “lo mezclan todo” y que las medidas correctoras no deben pasar por “penalizar” a los trabajadores
BILBAO, 30 (EUROPA PRESS)
El secretario general de CCOO, Unai Sordo, ha pedido “no demonizar” un derecho adquirido como la baja laboral al hablar de absentismo, problema para el que ha pedido hacer “un buen diagnóstico” de lo que ocurre para “proponer las medidas correctoras” que no pueden pasar, a su juicio, por “penalizar” a trabajadores que además “sufren enfermedades”.
El líder sindical ha hecho esta valoración en una entrevista concedida a Herri Irratia-Radio Popular, recogida por Europa Press, en la que ha afirmado que en torno al absentimoslaboral, “seguramente están pasando muchas cosas, todas a la vez, y no conviene demonizar un derecho adquirido como que es que una persona, cuando tiene un problema o tiene una enfermedad, no puede ir a trabajar”.
Sordo ha pedido hacer “un buen diagnóstico” porque es necesario “definir qué es absentismo porque, muchas veces, nos perdemos” y primero hay que evaluar de qué hablamos y a qué nos referimos cuando hablamos de absentismo”.
En este punto, ha criticado a “algunas organizaciones empresariales que dan a conocer estudios donde “lo mezclan todo”, ha lamentado, “las bajas con las bajas por contingencias comunes o las contingencias profesionales, los permisos de lactancia o las reducciones de jornada”.
Por ello, ha pedido que, las medidas correctoras que se vayan a proponer, “no pueden ir a penalizar a las personas que, encima, sufren enfermedades, estrés laboral o sufren horarios que son absolutamente incompatibles con la vida”, ha enumerado.
Para Sordo, hay también que preguntarse si el absentismo tiene que ver también con el incremento de la edad media de los trabajadores y las trabajadoras y con hasta qué punto la demora en las citas dentro de la atención sanitaria primaria retrasan los procesos de recuperación de las bajas por contingencias comunes y se incrementa el tiempo de baja”.
A su entender, todo eso “no es achacable al trabajador sino a un sistema en el que hay que invertir más para mejorar la atención primaria y la atención especializada y así poder recuperar antes a las personas y que no estén enfermas”.
En esta misma línea, el líder de Comisiones Obreras ha pedido analizar también si la distribución de los tiempos de trabajo no genera situaciones de ansiedad o de estrés que acaban afectando a las bajas de carácter psicosocial” o “si el hecho de no tener una red suficiente de cuidados para ayudar a los trabajadores, con personas dependientes o niños a su cargo, influye entonces en que tienen que dejar de ir durante unos días al trabajo”.
En este punto, se ha referido a la alusión por parte de las organizaciones empresariales a “lo poco productivos que somos en España” cuando, desde su perspectiva, “hay que preguntarse en quién recae la productividad” porque, ha añadido, “los datos están ahí y la productividad por hora trabajada en España está incrementándose y de una forma importante” como demuestra que “la economía española está creciendo más que el empleo”.
Otra cosa, ha proseguido, es la productividad del conjunto de los factores porque, tal y como ha recordado “si España ha tenido históricamente un problema de productividad, fundamentalmente eso tiene que ver con un déficit en la inversión para trabajar mejor y para que las empresas funcionen con más tecnología y con más digitalización”.
“Cuando dicen que primero hay que incrementar la productividad y después ya veremos si se suben los salarios o si se reducen las jornadas yo digo que la productividad es como el colesterol, la hay buena o la hay mala”, ha subrayado.
DOCE HORAS CON SMI
Para Unai Sordo, “hay que preguntarse si una empresa es productiva porque los trabajadores están doce horas al día cobrando el salario mínimo interprofesional, lo que no es un buen modelo de país ni de empresa o si se asume que la productividad a largo plazo va a mejorar si las empresas se hacen rentables de formas mucho más modernas que como se han hecho rentables en las últimas décadas en España”.
En su opinión, España debe apostar por incrementar la productividad con medidas como los sistemas de cualificación permanente de los trabajadores o por favorecer la inversión en actividad productiva, en economía real y economía productiva y no en economía especulativa o economía inmobiliaria”.
“Esa es, también, la forma de favorecer la productividad del país, no favorecer sectores rentistas que, al final, son retardatarios respecto a las mejoras de productividad”, ha concluido.
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