MADRID, 4 (EUROPA PRESS)
Sólo el 19,4% de los españoles que quiere mejorar la eficiencia energética de su casa tiene dinero para ello. El 54% afirma que, aunque le interesa hacerlo, no dispone actualmente de recursos económicos necesarios. Estos son algunos de los datos recogidos del Barómetro Saint-Gobain sobre los Hogares 2024 realizado en colaboración con Kantar.
El estudio se ha basado en un total de 1.025 encuestados entre el 22 de septiembre de 2023 y el 10 de octubre de ese mismo año en Madrid, Barcelona, Sevilla, Bilbao y Valencia. A lo largo del mismo, Saint-Gobain detalla que Madrid es la ciudad con mayor porcentaje de ciudadanos interesados en mejorar la eficiencia de sus hogares y con capacidad económica para hacerlo: un 24,4% de los encuestados. Bilbao también presenta un porcentaje elevado, con un 21,5%, mientras que en Barcelona este dato desciende hasta el 15,6%.
Por su parte, Sevilla y Valencia reflejan un alto nivel de interés en la eficiencia energética, con un 17,9% y un 18,3% respectivamente, aunque con menor capacidad económica para realizar mejoras en comparación con otras ciudades. En el resto de España, el 18,8% de los ciudadanos dispone de los recursos necesarios para invertir en este tipo de mejoras.
Según la investigación, un 6,9% de los españoles no sabe cómo mejorar la eficiencia de su vivienda ni tiene conocimiento del coste que ello implicaría. Este desconocimiento es especialmente notable en Bilbao, donde el porcentaje asciende al 10,9%. Además, uno de cada diez españoles (9,5% de los encuestados) no está interesado en realizar estas mejoras, aunque sí tiene capacidad económica para ello, porción alta en ciudades como Madrid (11,7%) y Bilbao (13,3%).
Por lo demás, un 10,3% no está interesado y tampoco cuenta con los recursos para invertir en eficiencia energética. Antes estos datos, Saint-Gobain España ha destacado que las cifras ponen de manifiesto la necesidad de concienciar a la población sobre los beneficios de la eficiencia energética, no solo desde el punto de vista del ahorro económico, sino también por su impacto en la sostenibilidad y el confort del hogar.
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