El ministro refuta el “mantra” del cambio de postura y afea a su vez al PP su “giro antimarroquí”
MADRID, 21 (EUROPA PRESS)
Tanto los socios de legislatura como la oposición han vuelto a pedir este martes explicaciones al ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación, José Manuel Albares, por el “giro” dado hace casi un año respecto al Sáhara y por los verdaderos motivos que han permitido una nueva relación con Marruecos y abierto una crisis diplomática con Argelia.
Casi un año después de la carta del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a Mohamed VI en la que indicaba que el plan de autonomía marroquí para el Sáhara es “la base más seria, creíble y realista” para resolver el conflicto, la mayoría de grupos parlamentarios han aprovechado la comparecencia del ministro en la Comisión de Exteriores del Congreso para reprochar la forma unilateral con que actuó y para pedirle que dé marcha atrás, como de hecho se le conminó desde la Cámara Baja.
La portavoz del PP, Valentina Martínez Ferro, ha afeado “el giro cuya contrapartida aún hoy desconocemos” como también se desconoce, ha dicho, “qué pasó con el móvil del presidente”, en referencia al espionaje del que fue objeto con el programa Pegasus igual que otros miembros del Ejecutivo.
La diputada ‘popular’ ha cuestionado el posicionamiento del lado de Marruecos “a cambio de nada” salvo de una nueva relación cuyo beneficio mutuo ha puesto en duda ya que, ha subrayado, la apertura de las aduanas de Melilla, cerrada desde 2018 por Marruecos, y de Ceuta, donde nunca existió, aún no se ha producido de forma plena sino solo con “una prueba piloto” y existe “un calendario secreto” sin un horizonte temporal.
Asimismo, ha llamado la atención sobre el hecho de que Mohamed VI no recibiera a Sánchez durante la reciente Reunión de Alto Nivel en Rabat, como había ocurrido siempre hasta ahora cuando la cumbre se produjo en suelo marroquí, algo que también ha comentado la portavoz de Ciudadanos, María del Carmen Martínez Granados. “No deben estar tan bien las relaciones con Marruecos cuando el rey no recibe al presidente”, ha comentado.
HUMILLACIONES DE MARRUECOS
El portavoz de Vox, Iván Espinosa de los Monteros, ha reprochado el secretismo con el que ha actuado el Gobierno en todo lo relativo al “repentino giro” respecto al Sáhara y se ha interesado también por el motivo detrás de “la sumisión a Marruecos”. “¿Por qué aceptan humillación tras humillación, por qué entregan todo a cambio de nada, qué hemos ganado?”, ha interrogado a Albares.
Desde ERC, su portavoz, Marta Rosique, ha incidido en que respecto a Marruecos “ni siquiera hay una misma posición en el Gobierno” y ha subrayado que si se ha decidido no hablar con Rabat de aquello que pueda molestar eso significa que no se puede hablar de Derechos Humanos, la tragedia de Melilla o de Pegasus, reprochando igualmente que el PSOE no haya respaldado el proyecto de ley para conceder la ciudadanía a saharauis nacidos antes de 1976.
Por su parte, el portavoz de EH Bildu, Jon Iñarritu, ha valorado positivamente que existe una buena relación con Marrueco, pero no “cuando el precio a pagar es el abandonado del pueblo saharaui y mirar para otro lado cuando ocurren tragedias en suelo español como la de Melilla”.
En este sentido, también se ha preguntado por “qué debe” el Gobierno a Marruecos y si existe “algún tipo de chantaje o soborno”, aunque se ha inclinado por pensar que lo que ejercen es su presión por ejemplo con el tema de la inmigración.
ALBARES REFUTA EL MANTRA
Albares se ha mantenido fiel al guión del Gobierno en todos estos meses, refutando el “mantra” de que ha habido un giro en la postura respecto al Sáhara e insistiendo en que el Ejecutivo sigue defendiendo la “centralidad” de la ONU y que cualquier solución llegará por esta vía.
Asimismo, ha aprovechado para reivindicar los resultados tangibles que la nueva etapa en la relación con Marruecos está brindando, empezando por la reducción de las llegadas de inmigrantes irregulares o las nuevas posibilidades de negocio que se abren ahora para las empresas españolas en el reino alauí.
En cuanto a la apertura de las aduanas en Melilla y Ceuta, ha asegurado que hay un calendario acordado con Marruecos pero cuyas fechas no se pueden desvelar por motivos de seguridad para evitar que se produzcan “avalanchas” y escenas del pasado por el llamado ‘comercio atípico’.
RIFIRRAFE CON EL PP
Albares se ha mostrado particularmente crítico con el PP, al que ha reprochado buscar intencionadamente “dañar” la relación con Marruecos al haber pedido que compareciera en el Congreso antes de la cumbre y recordado que tanto los presidentes como ministros anteriores siempre han reconocido lo prioritario de la relación con Rabat.
En este sentido, ha pedido a la portavoz del PP que abandonen los “bulos” a los que suelen recurrir en sus argumentos y que, si realmente quieren que la política exterior sea una política de Estado, “abandonen ese giro antimarroquí por el que se están deslizando” y que es contrario a lo que habían mantenido previamente dirigentes del partido.
Por otra parte, varios de los portavoces, en particular la del PP, han llamado la atención sobre el hecho de que la buena relación con Marruecos se ha hecho a costa de una crisis con Argelia. Martínez Ferro ha alertado de que con ello se ha puesto en peligro el suministro de gas a España, algo que Albares ha negado.
Es más, el ministro ha acusado a la diputada del PP de jugar con los intereses de España y de las empresas españolas con estas afirmaciones que no se sostienen en la realidad, ya que el propio presidente argelino garantizó el suministro y este no se ha visto afectado. “Argelia siempre ha sido y sigue siendo un suministrador fiable”, ha sostenido Albares, reiterando una vez más la voluntad del Gobierno de tener las mejores relaciones con este país.
- Te recomendamos -