MADRID 27 (EUROPA PRESS)
El Sindicato Español de Pilotos de Líneas Aéreas (Sepla) ha puesto en valor la actuación de la tripulación de un vuelo Madrid-Dusseldorf que el pasado lunes vivió un inesperado incidente en cabina.
Durante la fase de despegue, el comandante del Airbus A320 sufrió la mordedura de un arácnido, lo que podría haber comprometido la seguridad de la aeronave en un momento crítico. Sin embargo, la rápida reacción de la copiloto, quien tomó el control en cuestión de segundos, permitió que el vuelo continuara sin mayores contratiempos.
Sepla destaca este caso como un claro ejemplo de la necesidad de mantener la presencia de dos pilotos en cabina, subrayando que, ante situaciones imprevistas, la experiencia y la reacción humana son irremplazables.
Asimismo, recalcan que los avances en inteligencia artificial deben servir como apoyo, pero nunca como sustitución del factor humano en la aviación.
El sindicato concluye que este incidente, aunque anecdótico, es una prueba más de que la seguridad aérea depende de la preparación y profesionalidad de los pilotos.
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