MADRID, 22 (EUROPA PRESS)
El Ejército de Jordania ha incautado una “gran cantidad” de drogas en una nueva operación contra el narcotráfico en la frontera con Siria, después de que el Gobierno jordano haya asegurado que está “en una guerra” con las redes criminales dedicadas al contrabando de estupefacientes en la región.
Fuentes militares citadas por la agencia estatal jordana de noticias, Petra, ha indicado que la operación fue lanzada tras localizar a un grupo de narcotraficantes que intentaban cruzar la frontera irregular, lo que desencadenó posteriormente en enfrentamientos.
Así, han recalcado que los combates se saldó con varios heridos, mientras que otros de los contrabandistas se vieron forzados a huir de vuelta a Siria. Tras ello, las fuerzas de localidad hallaron 200.000 pastillas de captagon y 209 bloques de hachís.
Por último, estas mismas fuentes han reiterado que el Ejército aplicará “toda su fuerza” para evitar cualquier tipo de infiltración o contrabando a través de la frontera con el objetivo de “proteger las fronteras y a los ciudadanos del país”, ante el aumento de los incidentes de este tipo durante las últimas semanas.
El portavoz del Ejecutivo y ministro de Comunicaciones, Muhanad al Mubaidin, afirmó el martes que el país hace frente a un “giro cualitativo negativo” en la lucha contra el tráfico de drogas y armas y dijo que estos grupos están “apoyados por actores regionales” y buscan “contaminar la sociedad”. De esta forma, recalcó que “no son sólo grupos, sino una red de traficantes y milicias organizadas”.
Horas después, el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, con sede en Londres e informantes en el país, indicó a través de su página web que aviones de guerra jordanos han llevado a cabo bombardeos contra posiciones de estos grupos, a los que ha vinculado con las fuerzas de seguridad sirias y el partido-milicia chií libanés Hezbolá, sin que Amán se haya pronunciado al respecto.
Amán ha acogido durante los últimos meses varios encuentros entre ministros de Exteriores de países árabes, en los que Damasco se comprometió a “reforzar la cooperación” para luchar contra el tráfico de drogas y el contrabando, en el marco de los trabajos para la reintegración de Siria tras más de una década de aislamiento. En este sentido, Damasco se mostró dispuesto a cooperar con Jordania e Irak para identificar las fuentes de producción y distribución de narcóticos a través de sus fronteras.
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