MADRID, 28 (SERVIMEDIA)
Save the Children advirtió este viernes de que las decisiones tomadas últimamente por “algunos gobiernos”, como el de EE.UU., “pone en riesgo las vidas y futuro de millones de niños y niñas en el mundo”, los cuales “se enfrentan a los mayores índices de pobreza, conflictos y desastres naturales de nuestra historia reciente”.
Lo hizo en un comunicado en el que recogió unas declaraciones de su directora general, Inger Ashing, en las que subrayó que “el recorte de la ayuda humanitaria a nivel mundial es un momento oscuro y difícil para un mundo que ya lucha por satisfacer las crecientes necesidades de los niños y las niñas que se enfrentan a conflictos, pobreza, hambre y desastres climáticos”.
Tras poner de manifiesto que “las necesidades de la infancia nunca han sido mayores”, avisó de que “esta retirada de ayuda tendrá un impacto directo y mortal en algunos de los niños y niñas más vulnerables del mundo”. A pesar de ello, dejó claro que “no vamos a abandonar a la infancia”.
Save the Chidren afirmó que uno de cada 11 menores en el mundo requiere de la ayuda humanitaria para sobrevivir, lo que le sirvió para deslizar que “los recortes forzarán al cierre de programas con consecuencias catastróficas para las familias que dependen de ellos”.
En ese sentido, la organización recordó que alrededor de dos millones de kilos de alimentos destinados a la infancia que pasa hambre están siendo retenidos, incluso en zonas en las que se ha declarado hambruna; mientras que 45 millones de chavales en el mundo sufren desnutrición severa.
También denunció que cerca de 13 millones de suministros médicos de emergencia no han podido ser utilizados para atender a niños en contextos de emergencia debido a “la decisión de pausar la ayuda humanitaria”.
Save the Children arguyó que “el impacto de los recortes podría llevar a cierres de hospitales o de programas educativos en muchos de los lugares más desfavorecidos del planeta, especialmente donde existe un conflicto activo”.
Por su parte, el director general de Save the Children en España, Andrés Conde, consideró “muy preocupante que se reduzca la ayuda humanitaria mientras vemos que las demandas de la infancia en el mundo van en aumento”, como lo atestigua que “nunca antes ha habido tantos niños y niñas desplazados de sus hogares y uno de cada cinco niños vive o huye de un conflicto brutal y corre más riesgo de sufrir daños que en cualquier otro momento de los últimos 20 años”.
Reseñó que “los derechos de la infancia están por encima de cualquier decisión política”, por lo que “nadie puede poner en cuestión que los niños y las niñas merecen la máxima protección”.
Por ello, reclamó a la comunidad internacional que “frene lo que estamos percibiendo ya como una oleada de retroceso en la ayuda humanitaria y amenaza con llevarse por delante décadas de progreso”.
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