MADRID, 26 (EUROPA PRESS)
La ministra de Igualdad, Ana Redondo, ha puesto en valor el consenso entre los grupos parlamentarios para renovar el Pacto contra la Violencia de Género “en medio de tanto vocerío, de bulos y mentiras”, de “la sinrazón y el individualismo”.
“En medio de tanto vocerío, de bulos y mentiras, se alza el diálogo entre diferentes. La escucha de puntos de vista muy distintos, pero con un objetivo común, el interés general. En medio de la sinrazón y el individualismo, desde el Congreso de los Diputados, demostramos con el ejemplo que creemos en la comunidad que progresa sobre los valores que compartimos. Hoy hacemos honor en este Parlamento al noble arte de utilizar la palabra”, ha destacado Redondo durante su intervención en el Pleno del Congreso, antes de la votación.
El Pleno del Congreso ha aprobado este miércoles el dictamen para renovar el Pacto de Estado contra la Violencia de Género, que aprobaron los grupos en comisión el 17 de febrero, con el único voto en contra de Vox. En total, ha obtenido 315 votos a favor y 33 en contra.
En este sentido, la ministra de Igualdad ha agradecido la “inteligencia, empatía y responsabilidad” de todas las diputadas y diputados” que han hecho posible este “gran acuerdo”, cuyos nombres “perdurarán” en “la memoria colectiva” por “su valiosa contribución a una sociedad libre de violencias machistas”.
Asimismo, ha destacado la importancia de este avance en “un contexto histórico de recortes de libertades en el que la ola reaccionaria amenaza” con devolver a las mujeres “a tiempos pretéritos”. “No es fácil transformar una cultura global y milenaria de la dominación, de la imposición, de la violencia ejercida para torcer la voluntad de las mujeres, en una cultura del respeto, de la empatía y de la igualdad de derechos”, ha indicado.
Si bien, ha añadido que “en medio de la distopía” se alza “la utopía y la esperanza en una sociedad libre de violencias”. En este sentido, ha ensalzado las 460 medidas que contiene este nuevo pacto que dan “respuesta a formas de violencia machista despiadadas y feroces como la violencia vicaria” y que permite enfrentar “nuevas formas sofisticadas de dominación sobre las mujeres como la violencia digital”, así como la violencia económica, la violencia que se ejerce sobre las mujeres con discapacidad o sobre mujeres en el entorno rural.
Por su parte, la diputada del PP Ana Isabel Alós, ha destacado que “este pacto representa el mayor compromiso de la sociedad española para proteger a las mujeres frente a la violencia machista” aunque ha criticado a “quienes, con grandilocuencia y dogmatismo, se presentaron como los grandes defensores del feminismo y los derechos de las mujeres: Podemos, Sumar y el PSOE de Pedro Sánchez” y les ha acusado de “hipocresía” y de haber hecho “tanto daño a las mujeres con sus políticas como los discursos negacionistas de Vox”.
VOX, ORGULLOSO DE VOTAR EN CONTRA
Precisamente, la diputada de Vox ha subrayado la “oposición frontal” de su grupo a este pacto y ha asegurado que están “orgullosos” de ser los únicos en rechazarlo porque, a su juicio, es “un fracaso y una estafa a los españoles” que no defiende “la igualdad ante la ley de todos los españoles sin distinción de sexo” ni “la presunción de inocencia de los varones”.
Desde Sumar, la diputada Júlia Boada ha avisado de que “este no es 100%” el pacto que su grupo “querría” pero “es el mejor pacto posible” porque “pone en el centro a las mujeres que sufren violencia machista”, y ha agradecido “el debate serio, respetuoso” a todos los diputados y diputadas “menos a las de Vox” a las que ha afeado “su actitud de desprecio” y que “hoy se quedarán solas, aisladas”.
Para ERC, lo que hoy sale de este pleno es “un documento de mínimos” que “si es cierto que avanza en algunos aspectos” se deja “por el camino dos cuestiones: no reconoce ni la violencia obstétrica ni la violencia institucional”, según ha señalado la diputada Etna Estrems.
Tampoco está “de acuerdo al 100%” Junts que, a pesar de ello, lo ha apoyado porque el país se juega “mucho”, tal y como ha advertido la diputada Pilar Calvo, quien ha añadido que “si estas medidas sirven para salvar la vida de una sola mujer o de alguno de sus hijos, habrá valido la pena el esfuerzo”.
Desde Podemos, la diputada Noemí Santana ha “valorado positivamente” la renovación de este pacto pero ha pedido “no caer en el error de felicitarse de algo que aún no ha dado los resultados que se esperan” y ha lamentado que la violencia obstétrica sigue siendo “una gran invisible”.
Por el PNV, el diputado Joseba Andoni Agirretxea ha celebrado el “consenso” en este pacto a pesar de las “diferencias ideológicas” excepto Vox, “los autoexcluidos, que han sido lamentables”, la “ultraderecha” que “grita la libertad de la motosierra y la insolidaridad”, la “libertad para negar la existencia de esta lagra que es la violencia contra las mujeres” y ha advertido de que “eso no es libertad” sino “fascismo disfrazado del neoliberalismo más atroz”.
Mientras, la diputada de EH Bildu Isabel Pozueta ha destacado la importancia de este pacto en “un momento” en el que se siente “la realidad de la impunidad de los agresores y la amplificación de la negación de la violencia contra las mujeres como práctica y filosofía general de amplios sectores de la derecha y de la ultraderecha”. Además, ha aclarado que no comparten medidas cuyo objetivo es aumentar o endurecer las penas y ha subrayado la importancia de la formación de los operadores jurídicos porque “la justicia actual sigue siendo patriarcal, racista y clasista”.
Por su parte, el diputado de UPN ha calificado de “vergonzoso” que “aquellos partidos del Gobierno que se decían los más feministas de la historia tenían entre sus dirigentes a puteros y acosadores” y el diputado de BNG Néstor Rego ha subrayado la necesidad de incrementar los recursos económicos de las distintas Administraciones o de hacer efectivo el compromiso de incorporar en su totalidad el contenido del Convenio de Estambul.
- Te recomendamos -
