MADRID, 27 (EUROPA PRESS)
Naciones Unidas ha decidido anular su decisión de entregar asistencia en efectivo en dólares a los refugiados sirios en Líbano ante la tensión social y política causada por una medida que podría incrementar todavía más la presión sobre los refugiados, en el punto de mira de las autoridades y de parte de la opinión pública en medio de la extrema crisis económica que atraviesa el país.
Tras una serie de reuniones de los responsables de la ONU en el país con el primer ministro, Nayib Mikati, la organización internacional ha confirmado este sábado que “se ha tomado la decisión de pausar temporalmente” el llamado “mecanismo de moneda dual” que capacitaba a los refugiados para elegir si reciben la ayuda en dólares o libras libanesas a finales de mayo.
Naciones Unidas solía pagar la asistencia en dólares, pero las autoridades del país acabaron por convertirla en libras a sabiendas del enorme impacto por la gran volatilidad del tipo de cambio de la moneda nacional frente al dólar. Ahora mismo solo las familias libanesas pueden recibir ayuda en la moneda estadounidense.
Para los refugiados, Naciones Unidas mantendrá el modelo habitual de asistencia “mientras continúan las discusiones sobre las modalidades apropiadas” y “reitera su compromiso con los principios humanitarios al ayudar al Gobierno a ayudar a las personas más vulnerables en todo el país”.
“Todas las decisiones se toman con total transparencia y compromiso con nuestro mandato, incluidas las decisiones sobre modalidades de asistencia que se basan en pruebas sólidas y objetivas y en una investigación exhaustiva”, añade el comunicado, un paso atrás respecto a la decisión original adoptada el martes.
“Seguimos apoyando al pueblo y al Gobierno de Líbano durante estos tiempos difíciles y fomentamos un entorno de colaboración para llegar a los más necesitados, incluidos los refugiados”, remacha la nota, recogida por Naharnet.
Las autoridades libanesas han comenzado recientemente a tomar medidas enérgicas contra los refugiados sirios en el contexto del empeoramiento de la crisis económica y el estancamiento político, una escalada que ha causado pánico entre los sirios en el país, que suman ya aproximadamente entre 1,5 y 2 millones de personas.
La retórica se ha vuelto cada vez más acalorada hasta el punto de que una federación de sindicatos declaró recientemente una “Campaña Nacional para Liberar al Líbano de la Ocupación Demográfica Siria”, y el propio ministro de Asuntos Sociales, Hector Hajjar afirmó que los refugiados representan el 40 por ciento de la población del Líbano, algo que “ningún país del mundo podría aceptar”, según el ‘L’Orient le Jour’.
La declaración de la ONU ha sido emitida por el coordinador residente de la ONU y coordinador humanitario para Líbano, Imran Riza, el representante del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados en Líbano (ACNUR), Ivo Freijsen, y el representante del Programa Mundial de Alimentos en Líbano (PMA), Abdalá Alwardat.
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