MADRID, 14 (EUROPA PRESS)
El ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación, Luis Planas, ha asegurado que la Política Agrícola Común (PAC) tiene “presente y futuro”, destacando que estas políticas son “absolutamente necesarias” para el futuro de agricultores y ganaderos.
“Es una magnífica política agrícola común, que tiene presente y futuro. Ahora que hay elecciones europeas, la mayoría de los ciudadanos europeos creemos que hace falta apoyar al sector primario y por eso estas políticas son absolutamente necesarias para el futuro de nuestra agricultura y ganadería”, ha asegurado Planas en el Pleno del Senado.
El titular del ramo ha respondido así a la pregunta del senador de VOX, Ángel Gordillo Moreno, sobre las medidas que adoptará el Gobierno para mejorar las condiciones de los agricultores y ganaderos en la Política Agrícola Común (PAC). “Con sus ideas, España jamás habría entrado en la Unión Europea. Y, de hecho, no pudo entrar antes de 1975”, ha señalado, al tiempo que se ha mostrado “preocupado” al comprobar que VOX y PP dicen ahora lo mismo.
De esta forma, Planas ha recalcado que “siempre” está al lado de los agricultores y ganaderos, reconociendo que “hace falta rentabilidad para que haya sostenibilidad”.
Por otro lado, cuestionado por el senador de Esquerra Republicana, Jordi Gaseni, sobre cómo combatir la competencia desleal de terceros países en el sector primario derivada de la falta de control en las importaciones y los múltiples convenios de libre comercio firmados por el Gobierno, Planas ha reiterado que “no hay falta de control”, destacando que la Unión Europea, junto a Estados Unidos y Canadá, en el mundo, son las zonas “con mayor control”.
“Es bueno decirlo en voz alta, para tranquilidad, no sólo de los agricultores, sino del conjunto de los ciudadanos, las reglas de la seguridad alimentaria están plenamente respetadas desde el punto de vista comunitario”, ha recalcado, recordando que los acuerdos comerciales “no los firma el Gobierno”, sino la Unión Europea.
De esta forma, Planas ha recordado que la posición de España es “muy sencilla”: “Somos partidarios de un comercio internacional basado en reglas”.
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