MADRID, 11 (EUROPA PRESS)
El Ejército de Israel ha confirmado la muerte del líder local de Yihad Islámica en el campamento de refugiados de Nur Shams, junto a la ciudad cisjordana de Tulkarem, junto a otro “terrorista” en un bombardeo llevado a cabo por la Fuerza Aérea de Israel contra un vehículo en las proximidades del campo, donde la semana pasada fallecieron casi una veintena de personas en otro bombardeo israelí.
“Las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) y el Shin Bet realizaron anoche una operación conjunta junto con los combatientes de la Brigada Kafir en la que un avión ha atacado una zona de Tulkarem y ha matado a Muhamad Abdalá, el jefe de la organización terrorista Yihad Islámica en Nur Shams junto a otro terrorista”, reza un comunicado de las FDI publicado en su cuenta de la red social X.
Las FDI han asegurado que Abdalá era el sustituto del anterior jefe de la organización, Muhamad Yaber ‘Abu Shuya’, quien fue “eliminado” el pasado 29 de agosto, y que en los últimos meses había sido el responsable de organizar ataques contra las fuerzas israelíes en la zona. Además, han encontrado rifles M-16 en el vehículo atacado.
Si bien Yihad Islámica no se ha pronunciado por el momento, la Autoridad General de Asuntos Civiles ha identificado a los fallecidos como Muhamad Iyad Muhamad Abdulá, de 20 años, y Awad Yamil Saqr Omar, de 31 años, según ha informado el Ministerio de Sanidad vinculado a la Autoridad Palestina a través de un comunicado publicado en su perfil de la red social Facebook.
Fuentes de seguridad consultadas por la agencia de noticias palestina WAFA ha indicado que el bombardeo ha tenido lugar cuando los hombres se encontraban en un vehículo entre el barrio de Danaba y el campamento de refugiados de Nur Shams, en el oeste de Tulkarem. Los militares han irrumpido posteriormente en la zona y se han apoderado de los cuerpos de los fallecidos antes de retirarse.
El Ejército israelí ya llevó a cabo hace una semana un bombardeo sobre la ciudad de Tulkarem, dejando un balance de al menos 18 fallecidos. Las autoridades palestinas aseguran que muchos eran civiles, mientras que las FDI apuntan a que una docena eran “terroristas”.
En torno a 750 palestinos han muerto y más de 6.250 han resultado heridos en Cisjordania y Jerusalén Este a manos de las fuerzas de seguridad y de colonos israelíes desde los ataques de Hamás, que se saldaron con la muerte de 1.200 personas y otras 240 secuestradas. A ellos se suman en torno a 41.870 muertos en la Franja de Gaza como consecuencia de la cruenta ofensiva militar israelí.
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