MADRID, 18 (SERVIMEDIA)
La asociación Nofumadores pidió este miércoles al Gobierno que prohíba el tabaco y los cigarrillos electrónicos en el exterior de los establecimientos de hostelería.
Así lo demandó en un comunicado emitido después de que la Comisión Europea haya publicado una recomendación a los Estados miembro para que incorporen en sus legislaciones nacionales, entre otras, medidas para lograr el fin del consumo de tabaco y productos relacionados en las terrazas de hostelería y otros lugares compartidos, especialmente en parques infantiles públicos, parques de atracciones y piscinas, así como áreas al aire libre de centros sanitarios y educativos; edificios públicos; establecimientos de servicios y paradas y estaciones de transporte.
A este respecto, la presidenta de la entidad, Raquel Fernández Megina, emplazó al Ejecutivo a llevar a cabo la “desvinculación completa de tabaco y hostelería” para alcanzar la “desnormalización” del consumo de productos de tabaco y nicotina en espacios públicos compartidos con el objetivo de “acabar con las decenas de miles de muertes evitables en las próximas décadas” a causa del tabaquismo.
Para la asociación, “el éxito o el fracaso” de la modificación de la Ley del Tabaco “se medirá por la ampliación de los espacios libres de humo, especialmente las terrazas de hostelería”, razón por la cual juzgó “muy necesaria y urgente” esta recomendación de la Comisión Europea y confió en que “sirva” para que el Ministerio de Sanidad “proponga una ley de máximos” en la próxima modificación legislativa de la Ley de Medidas sanitarias Frente al Tabaquismo.
A juicio de su presidenta, “ha llegado el momento” de “avanzar” en la adopción de medidas “contundentes” que “reconozcan” que el tabaco “es incompatible con los derechos humanos, especialmente el de la salud”, convencida de que el cigarrillo “es un artefacto mortífero que pertenece a los museos”.
MUY POSITIVO E IMPORTANTE
La asociación también valoró como “muy positivo e importante” el hecho de que la Comisión haya ampliado su recomendación a todas las nuevas formas de consumo de tabaco y nicotina por su “grave impacto negativo en salud” frente al “falso mantra” de la industria del tabaco que, a su entender, “ha pregonado a los cuatro vientos que son una forma más “sana” de fumar y que sirven para dejarlo”.
Por último, lamentó que la recomendación haya sido publicada “con un año de retraso” como “consecuencia” de la “actividad incesante y soterrada” de los ‘lobbistas de las grandes tabaqueras en Bruselas que, según su punto de vista, “torpedean y ralentizan la aplicación de medidas de mayor calado”.
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