MADRID, 13 (EUROPA PRESS)
Un total de 435 trabajadores fallecieron en accidente laboral en los siete primeros meses del año, 36 más que en igual periodo de 2023, lo que en términos relativos implica un aumento del 9%, según datos provisionales del Ministerio de Trabajo y Economía Social.
La mayor parte de los accidentes mortales se producen por infartos y derrames cerebrales, atrapamientos y amputaciones, golpes resultado de una caída del trabajador y accidentes de tráfico.
Los accidentes con baja laboral se incrementaron un 1% hasta julio en relación al mismo periodo de 2023, hasta un total de 364.144 siniestros, de los que 314.027 se produjeron en el centro de trabajo (+0,4%) y 50.117 fueron accidentes ‘in itínere’ (los que se producen en el trayecto de casa al trabajo o viceversa), con un avance interanual del 4,7%.
De acuerdo con los datos provisionales del Ministerio, los accidentes mortales en jornada de trabajo subieron un 6,3% en los siete primeros meses del año, al registrarse 353 fallecidos, 21 más que en igual periodo de 2023, mientras que los siniestros ‘in itínere’ con resultado de muerte aumentaron un 22,4%, hasta un total de 82 fallecidos, 15 más que entre enero y julio de 2023.
Dentro de los accidentes mortales en jornada de trabajo, el sector servicios registró el mayor número de fallecidos, 181, con un incremento del 9% frente al periodo comprendido entre enero y julio de 2023.
También elevó su cifra de siniestros mortales con respecto a los siete primeros meses del año pasado el sector de la construcción, donde fallecieron 82 trabajadores, 12 más que en 2023 (+17,1%) e industria, donde murieron 59 trabajadores, uno más que en el mismo periodo del año anterior (+1,7%).
En cambio, los accidentes mortales bajaron en la agricultura, con 31 fallecidos, siete menos que hasta julio de 2023 (-18,4%).
SUBEN UN 16,4% LOS SINIESTROS ‘IN ITÍNERE’ GRAVES
Según la estadística de Trabajo, los accidentes graves en jornada laboral totalizaron en 2.186 hasta julio, un 1,2% más, mientras que los siniestros ‘in itínere’ de carácter grave aumentaron un 16,4%, hasta los 619.
Los accidentes leves en jornada de trabajo subieron un 0,4% en los siete primeros meses del año, hasta un total de 311.488, en tanto que los siniestros ‘in itínere’ calificados como leves se elevaron un 4,5%, hasta los 49.416.
MUEREN 32 AUTÓNOMOS EN ACCIDENTE LABORAL HASTA JULIO
La estadística de Trabajo revela además que de los 435 trabajadores que perdieron la vida en un accidente laboral hasta julio, 403 eran asalariados, 49 más que en 2023 (+13,8%), y 32 eran trabajadores autónomos, 13 menos que un año antes (-28,9%).
Del total de autónomos que perdieron la vida en accidente laboral, 31 lo hicieron en su centro de trabajo, 13 menos que un año antes, mientras que uno falleció en un siniestro ‘in itínere’, igual que el año anterior.
En total, los trabajadores por cuenta propia sufrieron hasta julio 19.105 accidentes laborales con baja, un 3,9% menos que en el mismo periodo de 2023, con un descenso del 3,8% en los accidentes ‘in itínere’ y un 3,9% menos que los siniestros en jornada de trabajo.
Asimismo, según los datos provisionales del Ministerio, en los primeros siete meses del año se notificaron 321.678 accidentes sin baja laboral, un 2% menos que en el mismo periodo de 2023.
CCOO AVISA DE LA FALTA DE MEDIDAS DE SEGURIDAD EN LAS EMPRESAS
Desde el sindicato CCOO, aseguran que los datos de siniestralidad laboral denotan la falta de medidas de seguridad en la empresa, ya que uno de los incrementos más acusados son los accidentes laborales por choques o golpes contra un objeto en movimiento, atrapamientos, los aplastamientos y amputaciones y las caídas, unos tipos de accidentes “fácilmente prevenibles”.
“Tenemos un grave problema de siniestralidad laboral en este país y los sindicatos ya no somos los únicos en decirlo”, ha señalado el secretario de Salud Laboral y Sostenibilidad Medioambiental de CCOO, Mariano Sanz, que ha recordado que la Memoria Anual de 2024 de la Fiscalía General del Estado advierte también del incremento de la siniestralidad desde 2013 por una relajación en el cumplimiento y aplicación de la normativa preventivo-laboral.
Por ello, ha instado al Gobierno a que priorice medidas que mejoren la seguridad y la salud en el trabajo. “La mesa de diálogo social sobre esta materia que tenemos abierta actualmente debe fijar objetivos ambiciosos que profundicen en la calidad de la prevención que se presta en las empresas”, ha concluido.
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