MADRID, 10 (SERVIMEDIA)
La ministra de Sanidad, Mónica García, se comprometió este jueves a ampliar la red de atención en salud mental con el desarrollo de herramientas para los profesionales, así como a combatir las “narrativas tóxicas” que perjudican especialmente a jóvenes y mujeres.
Así lo expresó durante la inauguración de la jornada ‘Nuevos surcos en salud mental’ celebrada en la sede ministerial con motivo de la celebración hoy del Día Mundial de la Salud Mental.
Durante su intervención, hizo un reconocimiento a los profesionales, familiares y cuidadores, a las organizaciones y asociaciones, a los investigadores y educadores y, sobre todo, a los propios pacientes.
Además, recordó que 40 años después de la reforma sobre salud mental en España, “nos encontramos en un momento crucial para reflexionar sobre la salud mental” y aunque se avanzó mucho en visibilizar la importancia de este tema, “los desafíos que enfrentamos siguen siendo enormes”.
“Creo que todos y todas estamos de acuerdo en que vivimos la era del agotamiento”, recordó, asociado al engranaje de expectativas ‘fake’. Se compite por metas irreales e inalcanzables “que nos generan una profunda frustración: cuerpos perfectos, carreras profesionales de éxito y una idea de vida que parece exigir más de las 24 horas que tiene un día”.
ANGUSTIA VITAL
En este sentido, lamentó que algunos ‘influencers’ creen expectativas y reprochan a sus seguidores que no sean capaces de superar su sufrimiento cuando no alcanzan a resolver problemas que son estructurales.
La angustia vital, insistió la ministra, no depende de hacer más o menos ‘burpees’, “este problema es consecuencia del desmantelamiento sistemático de los servicios públicos y del tejido social en los barrios de clase trabajadora durante décadas”.
En este contexto, añadió, “los más jóvenes son las primeras víctimas de estas expectativas falsas, en ámbitos como la vivienda, los empleos precarios o un futuro lleno de incertidumbre. Igualmente, las mujeres también son blanco de discursos que “impactan de manera devastadora en la salud mental”. A este respecto, García puso como ejemplos “la deriva reaccionaria actual sobre el aborto o la campaña de Trump”.
Para combatir estas “narrativas tóxicas”, indicó Mónica García, es imperativo avanzar hacia un modelo que comprenda que la salud mental no es una cuestión exclusivamente médica o individual y que ponga en primer plano los determinantes sociales de la salud.
COMISIONADO DE SALUD MENTAL
Con esa voluntad, recordó la puesta en marcha del Comisionado de Salud Mental, el nuevo Plan de Salud Mental 2025-2027, el Plan de Acción para la Prevención del Suicido y el nuevo modelo asistencial de salud mental, centrado en la accesibilidad y la autonomía del paciente.
Por su parte, la comisionada de Salud Mental, Belén González, señaló el trabajo y el tiempo como los principales factores que influyen en la salud mental actual. Por ello, instó a abordar esta cuestión desde la política, pero con rigor científico, y abogó por un enfoque más humano y acogedor en la asistencia en salud mental.
Del mismo modo celebró el 40 aniversario del cambio de modelo que supuso el cierre de los manicomios y la creación de la red comunitaria de salud mental, reconociendo que, si bien el contexto actual presenta una crisis distinta a la de entonces, exige políticas igualmente valientes.
Asimismo, Gonzáles alertó sobre el elevado consumo de psicofármacos en España, con un aumento del 250% en la prescripción de antidepresivos desde el año 2000, sin que esto se traduzca en una disminución de las enfermedades mentales. Además, resaltó la desigualdad en el consumo de ansiolíticos, siete veces mayor en personas con rentas bajas, subrayando la importancia de abordar los determinantes sociales de la salud.
Finalmente, defendió los derechos fundamentales y la autonomía de los pacientes, instando a que tanto las prácticas clínicas como las políticas internacionales reflejen este compromiso.
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