MADRID, 20 (EUROPA PRESS)
El Departamento de Justicia de Estados Unidos ha imputado con cuatro cargos federales a Salman Rauf Salman, del partido-milicia chií libanés Hezbolá, por organizar el mayor atentado terrorista de la historia de Argentina, el 18 de julio de 1994, contra la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA) en Buenos Aires.
“Hace casi tres décadas, el veterano terrorista de Hezbolá Samuel Salman El Reda ayudó a planificar y ejecutar el atroz ataque contra un centro de la comunidad judía de Buenos Aires que se saldó con la muerte de 85 personas inocentes e incontables heridos”, ha indicado en un comunicado el fiscal general adjunto estadounidense, Matthew Olsen.
Salman, conocido bajo el alias de ‘Samuel Salman El Reda’ y miembro de una rama del grupo terrorista especializada en Inteligencia –llamada Unidad 910– transmitió información vital a miembros de Hezbolá para perpetrar el ataque, tras el que siguió liderando otros operativos enfocados en el reclutamiento, entrenamiento y gestión en países como Tailandia, Panamá y Perú.
En concreto, el Departamento de Justicia resalta que en 2009 ordenó a un miliciano que viajara a Tailandia para destruir un alijo de nitrato de amonio y otros materiales explosivos, mientras que también mandó a otro miembro a vigilar el Canal de Panamá y las Embajadas de Estados Unidos e Israel en el país centroamericano.
El Reda está acusado de un cargo por proporcionar material a una organización terrorista, que conlleva una pena máxima de 20 años de prisión, así como por otro cargo de conspiración por los mismos motivos, cuya pena máxima es de 20 años.
De la misma forma, Washington le ha acusado por ayudar e instigar a recibir entrenamiento de tipo militar por parte de una organización terrorista, cargo que implica diez años de prisión, y finalmente ha sido imputado por otro cargo de conspiración, con una pena máxima de cinco años. El caso será llevado en un tribunal federal de Manhattan.
La Justicia argentina ordenó en junio de 2023 el arresto a nivel internacional de cuatro ciudadanos libaneses, dos de ellos supuestamente afincados en Paraguay, por su presunta vinculación con el atentado contra la AMIA.
El 18 de julio de 1994 85 personas murieron y unas 300 resultaron heridas por la explosión de un coche bomba junto a la sede de la AMIA, dos años después de que otra bomba destruyera la Embajada de Israel en la ciudad.
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