MADRID, 12 (SERVIMEDIA)
Mapfre ha vuelto a mejorar la previsión de crecimiento económico desde el 1,7% esperado en el trimestre anterior hasta el 2,2%, por la moderación de los costes energéticos, la recuperación del turismo y la normalización de los cuellos de botella.
Así se recoge en el informe ‘Panorama económico y sectorial 2023: perspectivas hacia el tercer trimestre’, publicado este miércoles, en el que se estima que el aumento del PIB para 2024 será del 1,9%.
La proyección macroeconómica para 2023 mejora la del Gobierno –2,1%–. También es más optimista que la del Fondo Monetario Internacional (FMI) –1,5%–, la Comisión Europea –1,9%– o la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) –2,1%–. No obstante, es algo más prudente que la de organismos nacionales, entre ellos, el Banco de España y la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal –2,3%–.
La inflación, por su parte, se situaría en el 3,4% este año, por debajo de las tasas del resto de países de su entorno y más moderada de lo esperado inicialmente. Desde este punto se reduciría hasta el 2,5% el año que viene.
Para Mapfre, los riesgos de corto plazo para la economía española derivan de los efectos del endurecimiento financiero y lo que estos impliquen en términos de contracción de crédito a la economía para efectos de consumo e inversión. De hecho, estos ya se estarían notando en la concesión de hipotecas, que cayeron un 18% en los cuatro primeros meses del año, según la aseguradora. El mayor coste de financiación pública también mermará el consumo público, “aunque este estará compensado con las ayudas de la Unión Europea (UE)”.
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