MADRID, 10 (EUROPA PRESS)
Los obispos portugueses han expresado su “plena comunión” con el Papa Francisco tras la publicación, el pasado mes de diciembre, de la declaración del Vaticano permite la bendición de las parejas homosexuales, los divorciados vueltos a casar y las parejas que conviven sin haber pasado por el altar.
“Tras la reciente Declaración ‘Fiducia supplicans’ sobre el significado pastoral de las bendiciones, del Dicasterio para la Doctrina de la Fe, que no altera la doctrina de la Iglesia sobre el matrimonio, el Consejo Permanente reconoce la acogida de todos en la Iglesia y expresa la plena comunión de los obispos portugueses con el Santo Padre”, subraya la Conferencia Episcopal en un comunicado.
Así lo han manifestado los obispos portugueses tras la reunión de su Consejo Permanente, que se celebró este martes 9 de enero. Durante el encuentro, los prelados reflexionaron también sobre otros temas como la agenda de la próxima Asamblea Plenaria, la próxima preparación de la visita ‘ad Limina Apostólica’ de los obispos portugueses, del 20 al 25 de mayo o el proceso sinodal en curso; y anunciaron que el próximo 14 de enero se reunirán con la asociación de víctimas de abusos sexuales en la Iglesia ‘Coração Silenciado’.
La adhesión de los obispos portugueses al Papa Francisco llega después de las reticencias manifestadas por algunos sectores de la Iglesia en el mundo, incluidos algunos obispos y cardenales, a la declaración ‘Fiducia supplicans’, publicada por el Vaticano, el pasado 18 de diciembre.
El propio prefecto emérito de la Congregación para el Culto Divino y Disciplina de los Sacramentos, el cardenal Robert Sarah, expresó este pasado lunes su “firme y radical” oposición a la declaración que permite las bendiciones de parejas homosexuales y divorciados vueltos a casar, porque lo considera “una herejía”.
El Dicasterio para la Doctrina de la Fe del Vaticano tuvo que emitir, el pasado 4 de enero, un comunicado de seis páginas en el que aclaraba que las bendiciones a los homosexuales, a los divorciados vueltos a casar y a las parejas que conviven sin haber pasado por el altar no suponen un “visto bueno” a estas formas de vida y no cambian la “doctrina sobre el matrimonio”.
“Las comprensibles manifestaciones de algunas Conferencias Episcopales sobre el documento Fiducia Supplicans tienen el valor de evidenciar la necesidad de un tiempo más prolongado de reflexión pastoral. Lo que han expresado esas Conferencias Episcopales no puede interpretarse como una oposición doctrinal, porque el documento es claro y clásico sobre el matrimonio y la sexualidad”, subraya la nota aclaratoria, añadiendo que “no habría lugar para distanciarse doctrinalmente” de la misma “ni para considerarla herética, contraria a la Tradición de la Iglesia o blasfema”.
En concreto, el Dicasterio para la Doctrina de la Fe aseguraba que esta declaración aprobada en diciembre por el Papa Francisco no cambia la “doctrina sobre el matrimonio” y que son los obispos los que pueden discernir “su aplicación según el contexto”. Además, ha precisado precisaba que no se “aprueban ni justifican la situación en que se encuentran esas personas”.
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