MADRID, 17 (EUROPA PRESS)
El Comité de Médicos de Sudán ha denunciado este lunes que varios hospitales han tenido que suspender sus operaciones tras ser afectados por los enfrentamientos que estallaron el sábado entre el Ejército y las paramilitares Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF), que han dejado hasta ahora cerca de cien civiles muertos, al margen de las bajas entre las fuerzas combatientes.
“Habíamos pedido previamente a las partes en conflicto que no atacaran instalaciones médicas, pero lo que ha pasado es justo lo contrario”, ha señalado el organismo en un comunicado en su cuenta en la red social Facebook en el que ha indicado que “hospitales e instituciones sanitarias de Jartum y otras ciudades de Sudán han sido bombardeados con cañones y otras armas”, lo que ha causado “graves daños” a varios de ellos.
Así, ha detallado que los hospitales universitarios Al Shaab y Jartum han quedado “fuera de servicio”, antes de apuntar a “un estado de confusión y miedo entre el personal sanitario, los pacientes, los niños y sus acompañantes”. “Estos bombardeos son una clara violación del Derecho Humanitario y los acuerdos que estipulan la protección de las instituciones sanitarias”, ha destacado.
La organización ha reseñado además que el Hospital Al Daman, en la ciudad de Al Obeid, “ha sido cerrado después de que irrumpieran en él las Fuerzas Armadas” y ha especificado que “el Hospital Internacional en Bahri sufre cortes de electricidad”. “Los generadores están a punto de quedarse sin combustible, lo que pone en peligro de muerte a los pacientes en unidades de cuidados intensivos y a los que están siendo sometidos a cirugías”, ha manifestado.
“Pedimos a la comunidad internacional que exija a las partes en conflicto que no causen daños a las instalaciones sanitarias, que abran corredores humanitarios y permitan el paso de ambulancias. Reiteramos nuestro llamamiento a las organizaciones humanitarias para que echen una mano y actúen urgentemente para ayudar a evacuar a los heridos y dar fluidos intravenosos, bolsas de sangre y ayuda médica”, ha remachado el Comité de Médicos de Sudán.
En este sentido, el subdirector del Hospital Al Shaab de Jartum, Al Tayeb Abdelrahman, ha afirmado en declaraciones concedidas a la cadena de televisión qatarí Al Yazira que el centro “ha sido bombardeado cuatro veces durante el día de hoy” y ha confirmado cuatro heridos entre el personal. Así, ha apuntado que el hospital está “totalmente rodeado” y ha alertado de que “la situación no es segura ni para los pacientes ni para el personal”.
Las principales organizaciones civiles y partidos políticos de Sudán han reclamado al unísono durante el fin de semana no solo el fin de los combates, sino también el final de la “militarización” que ha dominado “el espacio público” el país durante décadas y, en particular, desde el derrocamiento hace cuatro años del dictador Omar Hasán al Bashir tras una revolución en la que los civiles fueron parte instrumental.
El país africano estaba gobernado antes del estallido de los combates por una junta liderada por el jefe del Ejército, Abdelfatá al Burhan, que tenía como ‘número dos’ al cabecilla militar de las RSF, Mohamed Hamdan Dagalo, alias ‘Hemedti’. Las discrepancias entre ambos sobre la integración paramilitar en un futuro Ejército unificado –acuerdo previo a la formación de un nuevo gobierno de unidad liderado por civiles– acabaron degenerando en este conflicto.
- Te recomendamos -