MADRID, 23 (SERVIMEDIA)
El ministro de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030, Pablo Bustinduy, aseguró este martes que el programa de tarjetas monedero que su departamento lanzará en abril para ayudar a las familias en situaciones de vulnerabilidad extrema con hijos a cargo en la compra de alimentos les permitirá “no tener que ir a las colas del hambre” y supone “un paso decisivo para dignificar la protección social” en España.
Así lo defendió en la rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de Ministros, en la que se aprobó el Real Decreto por el que se regula la concesión directa de una subvención por un importe superior a los cien millones de euros a Cruz Roja Española para la puesta en marcha durante este año del programa del Fondo Social Europeo Plus de asistencia material básica (Programa Básico), en el que se enmarcan estas ayudas, que, según sus cálculos, beneficiarán a unas 70.000 familias y más de 100.000 personas.
No obstante, aseveró que será a través de los servicios sociales de las comunidades autónomas como se puedan “canalizar las demandas de participación y tener una orientación más fiable sobre el número final de destinatarios”.
A este respecto, indicó que el Consejo de Ministros ha “impulsado” un cambio de sistema por el que se facilitará a las familias vulnerables unas tarjetas monedero o vales canjeables por productos de alimentación y otros productos de primera necesidad como productos de higiene, en lo que, a su entender, será un modelo “menos estigmatizante” para las familias.
En este punto, explicó que, gracias al mismo, dichas familias podrán comprar estos productos “directamente” en el supermercado, se van a “aumentar” las cuantías que recibirán directamente, que irán entre 130 y 220 euros al mes en función del número de miembros, y que les permitirá acceder “directamente” a productos frescos como fruta y verdura que, según su punto de vista, por la “naturaleza” del anterior sistema de reparto de bolsas, “no era una opción posible”.
El titular de Derechos Sociales agregó que este programa de asistencia material básica se desarrollará en el “contexto” del “arranque” del Fondo Social Europeo Plus y que el Gobierno lo ejecutará mediante una subvención a Cruz Roja Española para poner en marcha este modelo y “pilotarlo” entre el mes de abril, cuando acaba el fondo anterior, y el 1 de enero de 2025, cuando serán las comunidades autónomas las que asuman la gestión “completa” del programa.
A su vez, subrayó que serán los servicios servicios sociales autonómicos los que “determinen” qué familias pueden participar y que las mismas tendrán que acudir a los centros de referencia de Cruz Roja, donde se les entregará las tarjetas monedero, que podrán utilizar a continuación para realizar sus compras en los supermercados colaboradores.
PALIAR LA POBREZA INFANTIL
A su entender, este cambio de modelo “dignifica la asistencia material básica en España, va a mejorar su funcionamiento, se dirige específicamente a paliar la pobreza infantil en España, va a mejorar la nutrición de los niños más vulnerables y también va a incidir en una mayor calidad de vida para sus familias”.
En este contexto, Bustinduy hizo hincapié en que las propias comunidades autónomas ya “asumieron y acordaron” este cambio de modelo “por unanimidad” en el Consejo Territorial de diciembre de 2021 y en que, con el real decreto aprobado este martes, ahora se trata de “darle tiempo y recursos a las comunidades autónomas para que se organicen para asumir la gestión completa del modelo” a partir de 2025.
En paralelo, destacó que este programa será financiado con el tramo estatal de los fondos del Fondo Social Europeo Plus, lo que, a su juicio, “liberará” los recursos autonómicos para que las comunidades autónomas “puedan atender otras necesidades y otros colectivos de manera adicional”.
Con relación al montante total, el titular de Derechos Sociales manifestó que la subvención directa concedida a Cruz Roja Española, de manera excepcional y por razones humanitarias, para que ponga en marcha este programa debe cubrir los gastos de gestión del programa entre abril y enero e incluye una partida de 95,5 millones para la adquisición de alimentos y productos de primera necesidad y 4,7 millones más para gastos de gestión de las tarjetas y gastos logísticos.
Bustinduy incidió, por último, en que se trata de un “paso decisivo hacia un modelo más justo, más digno y más eficiente” en el “marco general” de la “acción” de su departamento de “modernizar y mejorar la política social del país”.
En la misma línea, la portavoz del Gobierno, Pilar Alegría, subrayó que el “objetivo prioritario” de este programa es “seguir reduciendo la pobreza infantil” en España.
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