MADRID, 3 (EUROPA PRESS)
Al menos diez personas han sido detenidas y cuatro agentes de Policía han resultado heridos este sábado, el comienzo de una serie de unas 25 protestas de grupos de ultraderecha que recorrerán el país este fin de semana después de la muerte a puñaladas de tres niñas en la ciudad de Southport a manos de un adolescente galés falsamente identificado como un solicitante de asilo.
Ministros del Gobierno británico mantendrán este sábado un encuentro por videoconferencia para discutir las marchas de este fin de semana, después de que el primer ministro británico, Keir Starmer, anunciara la creacion de una nueva unidad policial para hacer frente a los disturbios violentos.
En una conferencia de prensa en Downing Street, el primer ministro criticó a una “minoría minúscula y sin sentido en nuestra sociedad” que había obligado a una comunidad “doliente” en Southport a “sufrir el doble” cuando organizaron una manifestación tras el ataque.
En Liverpool, por ejemplo, la Policía de Merseyside ha impuesto a partir de este mediodía y hasta las 00.00 una orden de la Sección 60 en el centro de la ciudad de Liverpool y sus alrededores, que concede a los agentes competencias adicionales para detener y registrar a individuos y está diseñado para prevenir violencia grave”.
La Policía del Gran Manchester (GMP) ha emitido un aviso de dispersión de la Sección 34 en todo el centro de la ciudad, donde los agentes también tendrán “competencias adicionales” para ocuparse de cualquier persona que participe en “comportamientos antisociales” en determinadas zonas hasta las 19.00.
Todo esto tiene lugar tras una noche de disturbios en Sunderland, en el norte de Inglaterra, donde los manifestantes han atacado una oficina de Policía, ocasionando un incendio en el edificio colindante, al tiempo que han mantenido enfrentamientos “a niveles graves y sostenidos de violencia” con las fuerzas de seguridad, contra quienes han lanzado latas y piedras a las puertas de una mezquita, según la cadena británica BBC.
Ante esta “deplorable” situación, las autoridades policiales locales han recomendado “a los ciudadanos que eviten la zona mientras los agentes se ocupan de la situación”. “Queremos dejar absolutamente claro que el desorden, la violencia y los daños que se han producido no serán tolerados. La seguridad de los ciudadanos es nuestra máxima prioridad”, agrega la mencionada nota.
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