MADRID, 23 (SERVIMEDIA)
Las microempresas están pudiendo beneficiarse en menor medida del momento de crecimiento de la actividad económica que vive España, ya que el aumento del empleo en estas compañías en 2024 fue del 0,8%, frente al 6,5% de las grandes (ocho veces más). Entre ambos extremos, tanto en las firmas pequeñas (de 10 a 49 asalariados) como en las medianas (de 50 a 249), el aumento interanual fue del 3,2%.
Así se desprende de los datos del último Indicador Cepyme correspondiente al último trimestre de 2024, en el que se pone de relieve la dispar evolución del empleo, una situación que no solo se da en el último año, sino en los ejercicios anteriores.
El empleo asalariado en las pymes, que se había debilitado en el tercer trimestre —cuando subió un 1,9% interanual, que fue el menor aumento en tres años y medio— recobró fuerza en la parte final del año pasado, creciendo un 2,4% interanual.
Un aspecto “positivo”, según Cepyme, es que, por segundo trimestre consecutivo, el número de asalariados en las pymes creció menos que el volumen de ventas. Ello contribuye a compensar parte de la productividad media perdida en los trimestres anteriores.
De los 640.600 empleos asalariados creados por el sector privado en 2024, un 66,4% correspondió a grandes empresas (425.400 empleos), mientras que el conjunto de pymes aportó el tercio restante (215.200 puestos de trabajo). Dentro de las pymes, el más de un millón de microempresas con asalariados solo creó 25.700 empleos (4% del total), frente a 103.800 empleos de las empresas pequeñas (16,2% del total) y 85.600 de las compañías medianas (13,4% restante). Ya suman tres años y medio en los que el aumento del empleo en las microempresas es más lento que en el resto de pymes.
Como cabría esperar, la evolución del número de empresas registradas en la Seguridad Social (es decir, las empresas con empleados) refleja lo recién comentado con relación al empleo. También en este caso, el dinamismo continúa siendo mayor cuanto más grande es el tamaño promedio de la firma.
Así, el número de pymes creció un 0,5% interanual en el cuarto trimestre, en línea con el incremento del último año y medio. A su vez, tal incremento surge de un avance de 3,1% interanual en la cantidad de empresas medianas, simultáneo a un aumento del 2,8% en la de firmas pequeñas y uno de tan solo 0,1% en el parque de microempresas. Por su parte, el número de grandes empresas aumentó un 5,7%.
El número de pymes apenas ha cambiado a lo largo de los últimos cinco años. De hecho, el incremento acumulado desde el final de 2019 es el mismo que el de 2024, un 0,5%. Cuando se desagrega este dato entre los diferentes tamaños de pymes se observan realidades dispares.
Por un lado, la cantidad de microempresas, que en los últimos cinco años cayó un 1%. Por otro, las empresas pequeñas, cuyo número aumentó un 9,8%, y las medianas, que aumentaron un 8,7%. En todo caso, el incremento en el parque de compañías pequeñas y medianas queda empequeñecido cuando se compara con el de las grandes empresas, que avanzaron un 19,5%.
Relacionando el número de empresas de cada tamaño con la correspondiente expansión de las plantillas, se puede deducir que, durante los últimos cinco años, en promedio, cada empresa grande creó 230 nuevos empleos. Al mismo tiempo, cada firma mediana incorporó a 10 asalariados y cada compañía pequeña contrató, siempre de media, a dos empleados. En cambio, hicieron falta 34 microempresas para crear un único puesto de trabajo asalariado.
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