MADRID, 06 (SERVIMEDIA)
Las familias monomarentales denunciaron este jueves la “invisibilización” que sufren y las “múltiples discriminaciones” a las que tienen que enfrentarse.
Así lo lamentó la Federación de Asociaciones de Madres Solteras-FAMS en un comunicado emitido coincidiendo con la conmemoración, el sábado, del Día Internacional de la Mujer, y en el que subrayó que su modelo familiar “incomoda porque la sociedad aún está cargada de estigmas y construcciones sociales derivadas del patriarcado y machismo”.
Tras puntualizar que lleva 30 años reivindicando una ley que “defina, reconozca y proteja” a las madres monomarentales y a sus hijas e hijos “como ciudadanas y familias de pleno derecho”, puntualizó que el último proyecto de Ley de Familias presentado en febrero de 2024 “lleva un año encerrado en un cajón” y dijo “temer que quede encerrado como en ocasiones anteriores”.
En este contexto, criticó la “falta de interés político” recordó que, tanto desde FAMS como desde la Red Estatal de Familias Monoparentales, se ha “denunciado y puesto sobre la mesa” ante responsables políticos las “múltiples discriminaciones y los grandes obstáculos para la conciliación de la vida familiar y laboral de las monomarentales”, cuyos hogares son los que “mayor tasa de riesgo de pobreza y exclusión social presentan”.
“La sociedad, como han denunciado otras entidades nos penaliza primero por ser mujer, después por ser madres y a nosotras por serlo todo junto: monomarentales”, afirmó la federación, convencida de que la “vulnerabilidad” derivada de la “falta de reconocimiento” de este modelo familiar “no debería ser una estrategia política”.
ACERCARSE A LA MONOMARENTALIDAD
A este respecto, advirtió de que “acercarse” a la monomarentalidad es “acercarse a la feminización de la pobreza actual en la sociedad debido a la desigualdad de género existente los salarios y condiciones de empleo”.
“A esto se suma cómo la feminización de los cuidados, a pesar de las políticas corresponsables y de conciliación que se han elaborado, de las que las monomarentales quedan excluidas, ya que ellas deberían conciliar con las instituciones públicas ante la inexistencia de otra persona progenitora en la crianza, persiste aún hoy en día”, abundó, consciente de que la “desigualdad de género de base” en la sociedad en cuanto a la conciliación, el empleo y los ingresos “supone mayor vulnerabilidad para las mujeres monomarentales”.
VIOLENCIA MACHISTA
Por último, aseveró que “no enfocar” la monomarentalidad desde la “posición clara” contra la violencia machista y la “justicia patriarcal asentada en la agenda feminista” es “no contemplar la monomarentalidad” y abogó por incluir como situación de monomarentalidad a las víctimas de violencia de género en su definición.
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