MADRID, 12 (SERVIMEDIA)
La exportación e importación de vehículos registró en el primer semestre un saldo positivo de 9.250 millones de euros, lo que supone una reducción del 0,3% respecto al mismo periodo de 2023, según datos publicados este jueves por la patronal de fabricantes Anfac, que confirman que el vehículo se mantiene como primer producto en aportación positiva a la balanza comercial de España.
La asociación atribuye la ligera caída en el superávit a la lenta mejora de los mercados europeos, que condiciona la recuperación de la producción de vehículos española y, con ello, su exportación.
Las ventas de vehículos al extranjero crecieron hasta un valor total de 22.636 millones de euros, con un incremento del 0,8% respecto a enero-junio del año pasado. Este crecimiento se debe sobre todo a la buena evolución de las exportaciones hacia Francia y Reino Unido, que han aumentado el número de importaciones de vehículos fabricados en España en este periodo de tiempo de manera considerable.
Por su parte, el valor de las importaciones de vehículos en España se situó en 13.386 millones de euros, tras crecer un 1,5% con respecto al primer semestre de 2023.
Por otro lado, el sector de componentes ha registrado en la primera mitad de 2024 una caída del 2,6% en sus exportaciones con 6.741 millones de euros, y también en sus importaciones con una reducción del 3,1% hasta los 9.970 millones de euros. Con esto, el sector de componentes ha obtenido un saldo negativo por valor de 3.229 millones de euros en el primer semestre del año.
El sector de la automoción en su conjunto (vehículos y componentes) ha aportado a la balanza comercial durante el primer semestre de 2024 un saldo positivo total de 6.021 millones de euros, un 2% superior respecto al mismo periodo del año anterior.
De esta manera, el valor de la exportación del sector de la automoción se mantiene en comparación con el mismo periodo de 2023 sin variación, con 29.377 millones de euros. Por otro lado, el valor acumulado por la importación de vehículos y componentes disminuyó un 0,5%, con 23.356 millones de euros al finalizar el primer semestre de 2024.
DESTINOS
El mercado europeo se mantiene como el principal destino de las exportaciones de los vehículos fabricados en España, con el 92,8% de los envíos totales1. Al cierre del primer semestre de 2024, por valor económico, Francia se ha posicionado en la primera posición con una cuota del 20,4% y 4.625 millones de euros recuperándose con una variación del 14,5% en comparación al mismo periodo del año pasado. A continuación, se encuentra Alemania, con una cuota de 19,4% y un valor de 4.393 millones de euros, un 0,8% menos que en el mismo periodo de 2023. Completa el top 3 Reino Unido con una cuota de 11,9% y 2.693 millones, anotando un crecimiento del 23,2% respecto al primer semestre de 2024. Fuera de la UE, llama la atención el crecimiento México, noveno país de exportaciones, con 379 millones de euros (+ 49,3%) y una cuota del 1,7%.
En lo que respecta a las importaciones de vehículos al cierre del primer semestre de 2024, Alemania, con 3.297 millones de euros y una cuota del 24,6%, se mantiene a la cabeza; Japón, asciende a la segunda posición con 1.207 millones de euros, una cuota de 9,0% y una variación del 71,8%. Finalmente, en el tercer lugar se encuentra China, que ha descendido una posición hasta el tercer puesto con 1.127 millones de euros y una cuota de 8.4%. Si bien se ha incrementado la presencia de productores asiáticos en el continente europeo, y puntualmente en España, aún el primer puesto de origen de las importaciones lo mantiene Alemania.
José López-Tafall, director general de ANFAC, ha destacado que “la automoción vuelve a demostrar que es un sector de gran valor para nuestro país. El vehículo “made in Spain” logra mantenerse como el producto de mayor aportación positiva a nuestra balanza comercial y es un hecho que se ha de tener muy en cuenta. Nuestro sector atraviesa una gran tranformación, y su continuidad es crucial por la relevancia y aportación de renta que trae a nuestra economía. Nuestros vehículos han sido y son altamente valorados en todo el mundo, por ello, es fundamental que en la carrera por el liderazgo en la electromovilidad el vehículo eléctrico “made in Spain” siga siendo competitivo y fruto de la colaboración público-privada”.
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