El cerco de Israel al enclave ha provocado una escasez que amenaza con la suspensión de los servicios sanitarios en la Franja
MADRID, 17 (EUROPA PRESS)
Las autoridades de la Franja de Gaza, controlada por el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás), han lanzado este “un llamamiento urgente” a cualquiera que tenga combustible para que contacte “inmediatamente” con el Ministerio de Sanidad gazatí, ante el riesgo de que los centros médicos y hospitales queden sin suministros, lo que pondría en peligro la vida de miles de heridos y enfermos.
“Las admisiones en hospitales están en un estado de colapso virtual a causa de los cortes de electricidad”, ha explicado el portavoz del ministerio, Ashraf al Qidra, quien ha pedido a los dueños de gasolineras y a todos los palestinos residentes en el enclave y tengan “cualquier litro” de combustible que contacten con las autoridades o llamen a un teléfono gratuito, según un mensaje publicado en la cuenta en la red social Facebook de la cartera gazatí.
Horas antes, el Turkish Friendship Hospital, el único centro oncológico en el enclave palestino, ha suspendido gran parte de sus servicios a causa de la escasez de combustible y ha alertado de que tendrá que parar todas sus actividades en 48 horas, según su director, Sobhi Skik, mientras que la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Oriente Próximo (UNRWA) ha indicado que “se espera que las reservas de combustible en todos los hospitales de Gaza duren otras 24 horas”.
“El apagado de los generadores de apoyo pondría en grave riesgo la vida de miles de pacientes”, ha alertado el organismo, que ha subrayado que “se necesitan 600.000 litros de combustible al día en Gaza para operar las plantas de agua y desalinización” y ha recalcado que “el agua sigue siendo clave, ya que la gente empezará a morir si no tiene agua”, en medio de la escasez causada por el “cerco total” impuesto por Israel al enclave, que impide la entrada a comida, agua, electricidad y combustible, entre otras cosas.
Las autoridades de Gaza han elevado este mismo martes el balance de víctimas por los bombardeos de Israel tras el ataque lanzado el 7 de octubre por el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) a más de 2.800 muertos y cerca de 12.000 heridos, si bien el propio Al Qidra dijo el lunes que se habían registrado denuncias sobre cerca de 1.200 desaparecidos entre los escombros, entre ellos cerca de 500 niños, por lo que se teme que el balance de fallecidos sea aún mayor.
- Te recomendamos -