MADRID, 31 (EUROPA PRESS)
Al menos 67 trabajadores de la agencia de Naciones Unidas para los refugiados palestinos en Oriente Próximo (UNRWA) han fallecido en la Franja de Gaza como consecuencia de la ofensiva lanzada por las fuerzas israelíes sobre el territorio costero, según la propia organización, que ha confirmado además 22 empleados heridos.
La agencia ha denunciado ataques sobre sus instalaciones prácticamente desde el inicio de los bombardeos israelíes, emprendidos como respuesta a los atentados de Hamás del 7 de octubre. En total, 44 instalaciones de la UNRWA han sufrido daños, lo que incluye también escuelas que, hoy por hoy, no funcionan como tal.
De hecho, a ellas han recurrido cientos de civiles palestinos en busca de refugio. Los edificios vinculadas a la UNRWA albergan a más de 670.000 desplazados, pese a que según la propia organización no hay espacio ni capacidad para atender a este volumen de personas, que malviven en condiciones precarias y sin apenas suministro básicos.
“Viven en condiciones terribles”, denunció el lunes el comisionado de la UNRWA, Philippe Lazzarini, en declaraciones ante el Consejo de Seguridad, desde donde advirtió de que “el nivel de destrucción no tiene precedentes” y “la tragedia humana que se despliega ante nuestros ojos es insoportable”.
Lazzarini señaló que “el hambre y la desesperación (de la población gazatí) se está convirtiendo en enfado contra la comunidad internacional y, en Gaza, la comunidad internacional es la UNRWA”. La organización ya denunció el fin de semana el saqueo de varios de sus almacenes.
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