MADRID, 12 (SERVIMEDIA)
El Ayuntamiento de Madrid puso en marcha ‘La Tribu del 12’, un proyecto piloto en el colegio El Madroño del distrito de Puente de Vallecas que ofrece una alternativa de actividades a más de 30 niños vulnerables de entre 9 y 12 años para que no caigan presos de bandas juveniles violentas.
La vicealcaldesa de Madrid y delegada de Seguridad y Emergencias, Inma Sanz, visitó este miércoles el centro educativo y compartió con los miembros de la tribu una jornada de actividades. El programa previene la captación de estos niños y adolescentes por bandas juveniles violentas mediante un apoyo integral que incluye el fomento de alternativas de ocio saludable, la adquisición de habilidades y la generación de un entorno seguro.
El coordinador del proyecto, Miguel Ángel Álvarez Tornero, explicó que el problema es que las bandas juveniles ya no necesitan entrar a los institutos para captar a los menores sino que lo pueden hacer a través de redes sociales. Asimismo, señaló que muchos de los jóvenes que participan en el programa experimentan problemas de soledad no deseada y duelo migratorio que le lleva a buscar “escapatoria”.
Así, la tribu busca ofrecerles “apego, familia, su gente y su grupo” para que desarrollen su personalidad en un entorno positivo y sano. Algunas de las actividades además permiten que haya niños que salgan por primera vez de su distrito. Muchos de de estos chicos y chicas eran la primera vez que salían del barrio, nunca habían pasado la avenida de la Albufera”.
El Ayuntamiento de Madrid eligió este proyecto por el lugar en el que está ubicado, “una zona donde la mayoría de las viviendas que hay son viviendas sociales”, Álvarez a modo anecdótico apuntó que “curiosamente hay pocos bares, es decir, la gente no se socializa demasiado” y “prácticamente toda la chavalería es vulnerable”.
DISMINUCIÓN DEL ABSENTISMO
La familias en ocasiones tienen dificultades para la conciliación y algunos de los niños llegan por situaciones de reagrupamiento familiar con 12 años a un país en el que no conocen a nadie, no tienen amigos y por medio de la tribu pueden “integrarse”. Según los datos obtenidos tras los primeros meses el absentismo se ha reducido drásticamente y está previsto que el proyecto piloto con capacidad para hasta 60 jóvenes se amplíe a colegios cercanos.
El programa se apoya en un contrato que complementa el trabajo municipal, adjudicado para dos cursos y prorrogable por otros tres, por un importe total de 425.000 euros y que es financiado con los fondos SURES de reequilibrio territorial del Ayuntamiento.
Cuando superen los 13 años y concluyan su participación en el programa, los chavales participantes podrán continuar vinculados a proyectos socioeducativos municipales desarrollados en el distrito como el programa ‘Quiére-T mucho’, que se desarrolla hasta que cumplan 22 años.
La vicealcaldesa destacó que el programa funciona por las tardes y en fin de semana y que fueron los “agentes tutores” de la Policía Municipal quienes también dieron la alerta para comenzar el proyecto en esta zona por “situaciones ya de grave riesgo”, por lo que avanzó su voluntad de “consolidar” el programa en la zona.
ENTREVISTA CON LA VICEALCALDESA
Añadió además que se empieza a trabajar desde edades tempranas para evitar el problema de las bandas juveniles y relató que el nombre de Tribu del 12 además de por el hecho de querer ser una tribu para los niños hace referencia a la edad de los 12 años por ser un momento de muchos cambios en la transición a la adolescencia.
Durante la visita los miembros de la tribu pudieron entrevista a la vicealcaldesa para conocer más sobre su trabajo y sobre como llegó hasta donde está. Sanz compartió su “pasión” por la política y recordó que fue su cercanía con el alcalde, José Luis Martínez-Almeida, y el buen entendimiento que tenían cuando ambos trabajaban en la Comunidad de Madrid lo que le llevó a entrar en el Ayuntamiento. “Es muy importante hacer equipo”.
Relató también que lo que más le gusta de su trabajo es poder pensar en como mejorar la ciudad y luego ver esas ideas aplicadas y funcionando, como es el caso del soterramiento de la A-5. Finalmente acompañó a los niños en sus actividades y en agradecimiento les invitó a pasar un día en el Zoo de Madrid.
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