MADRID, 04 (SERVIMEDIA)
La Seguridad Social perdió en agosto 185.385 afiliados por la estacionalidad de este mes (-0,88%), hasta situarse en 20.706.500, bajando de la barrera de los 20,8 millones de ocupados que España logró mantener desde el pasado mayo.
Así se desprende de los datos de afiliación difundidos este lunes por el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, que ponen de relieve que, pese a la destrucción de empleo de agosto, España tiene la cifra más alta de ocupados de toda la serie histórica para este mes del año.
Además, el número de cotizantes experimentó, en comparativa interanual, un repunte del 2,76%, lo que supone 555.499 personas más que en el octavo mes del año pasado. De igual modo, en el periodo enero-agosto de 2023, la afiliación media creció en 410.229 personas.
La mayoría de las actividades registraron descensos. Destacó la caída en educación, que perdió 2.069 cotizantes en agosto, un 2,17% menos. Esta bajada se suma a los fuertes retrocesos experimentados en junio y julio por el final del curso escolar.
A continuación, el comercio perdió 2.015 cotizantes, un 0,27% menos. Con signo contrario, sólo crecieron las actividades inmobiliarias, en 17 cotizantes (+0,03%), y el suministro de energía eléctrica, gas, vapor y aire acondicionado, en un cotizante.
De su lado, el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA) totalizó 3.333.617 afiliados, tras perder 10.945 personas en el mes, un 0,33%. En cambio, en el año sumó 6.181 ocupados (+0,19%).
El régimen del mar perdió 452 afiliados medios en agosto (-0,67%) y dejó el total en 67.320 cotizantes. En el último año se dejó 156 afiliados. Asimismo, el del carbón contabilizó 953 cotizantes, cinco menos que en julio y 69 menos que en agosto de 2022.
En cuanto a las comunidades autónomas, sólo cuatro lograron avances en cotización respecto a julio. Asturias sumó un 0,17% con 664 afiliados más. A continuación, se situaron Extremadura (+0,16% y 685 cotizantes nuevos), Canarias (+0,15% y 1.317 cotizantes) y Cantabria (+0,05% y 111 cotizantes).
En el extremo opuesto, las comunidades peor paradas en el mes de agosto fueron la Región de Murcia, con una caída mensual del 1,92% y 12.469 cotizantes nuevos; Cataluña (-1,61% y 60.317 cotizantes menos), Comunidad Valenciana (-1,29% y 27.199 afiliados) y País Vasco (-1,23% y 12.238).
DESESTACIONALIZACIÓN
Descontando la estacionalidad y el efecto calendario, el número de afiliados creció en 17.745 afiliados, hasta los 20.722.990. En magnitudes acumuladas, España ganó 482.096 ocupados en los ocho primeros meses del año en términos desestacionalizados.
En esta línea, y según las cifras del departamento dirigido por José Luis Escrivá, en el periodo enero-agosto se creó más empleo que en todo el año 2022 y se registró el mayor incremento de la serie, descontando 2005 (por la regularización extraordinaria) y 2021 (año de recuperación tras la pandemia).
Respecto al nivel previo a la pandemia (febrero 2020), la afiliación aumentó en más de 1,3 millones de personas en términos ajustados, de las que dos de cada tres corresponden al sector privado.
El crecimiento de la afiliación respecto al nivel previo a la pandemia es especialmente intenso en sectores de alto valor añadido como informática y telecomunicaciones, cuyo número de afiliados creció un 23,9%, o actividades profesionales, científicas y técnicas, que presenta un crecimiento del 14,4%. Desde el fin de la pandemia, uno de cada cuatro nuevos afiliados (291.000 en términos absolutos) se incorporó a estos dos sectores.
Además, en comparación con el nivel anterior a la pandemia, el empleo femenino también muestra un especial dinamismo. En concreto, la afiliación a la Seguridad Social de mujeres ascendió un 8,6%, que son 3 puntos más de lo que lo ha hecho el de los hombres.
Asimismo, el empleo juvenil creció un 10,4% en comparación con el nivel previo a la covid-19, lo que supone 3,4 puntos porcentuales por encima de la media. Si se analiza respecto a antes de la reforma laboral (diciembre de 2021), el aumento del empleo entre los menores de 30 años es del 12,7%, casi el triple que el promedio de todas las edades (4,4%).
INDEFINIDOS
Por tipo de contrato, en agosto, el porcentaje de afiliados con contrato temporal se situó en el 15%, casi la mitad del que se registraba antes de la reforma laboral (29%).
En el caso de los menores de 30 años, la reducción de la tasa de temporalidad es más intensa, bajando en 28 puntos (del 53% al 25%) respecto al nivel que tenía antes de la reforma.
Por sectores, se reduce la temporalidad en todos, pero destacan especialmente en aquellos con una tasa históricamente elevada, como construcción y hostelería, donde se reduce el peso de los temporales un 29,7% y 22,6%, respectivamente, desde la puesta en marcha de la reforma laboral.
En conjunto, ahora hay más de 2,8 millones de afiliados más con contrato indefinido que en diciembre de 2021, el último mes antes de la entrada en vigor de la nueva legislación del mercado de trabajo.
Además, entre enero y agosto de este año, la duración media de los contratos creció un 34% (hasta 257 días) en comparación con las cifras del mismo periodo de 2019, último año homologable anterior al impacto de la pandemia, mejorando los datos de 2022.
En otro orden de cosas, el número de trabajadores en ERTE se mantiene en niveles mínimos, en el entorno de los 11.000, que suponen menos del 0,1% del total de afiliados.
Por último, los ingresos por cotizaciones sociales registraron hasta julio (último mes con datos disponibles) un crecimiento del 10,2%. Si se descuenta el efecto de los ingresos provenientes del Mecanismo de Equidad Intergeneracional (MEI), que se ha empezado a aplicar en enero de 2023 para rellenar la ‘hucha’ de las pensiones, las cotizaciones crecen a un ritmo del 8,4%.
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