MADRID, 15 (SERVIMEDIA)
La Reina Letizia cumple este jueves 50 años en la intimidad y sin actos oficiales. En la celebración íntima y familiar no estarán ni su hija mayor, la princesa de Asturias, que estudia segundo de Bachillerato en el UWC Atlantic College de Gales (Reino Unido), ni su suegra, la reina Sofía, que está en Nueva York porque esta noche asiste a un concierto para conmemorar el 40º aniversario del hermanamiento de las ciudades de Madrid y la ciudad de los rascacielos. Su suegro tampoco estará porque sigue en Abu Dabi.
Poco o nada ha trascendido desde Zarzuela sobre el número de invitados ni la hora de la celebración, pero sí habrá habrá fiesta de cumpleaños reducida, con parte de la familia y su grupo de amigos. No es probable que Zarzuela difunda fotos, como sí hizo cuando doña Letizia cumplió 40 años.
Hoy ni la Reina ni el Rey tienen actos oficiales en la agenda, descansan, pero no es algo raro. No todos los días tienen audiencias o encuentros. Sin embargo, no parece casual que este 15 de septiembre no tengan ninguna cita que conllevaría presencia mediática. La Reina quiere celebrar su cumpleaños con tranquilidad.
En junio de 2014, con la entronización del rey Felipe VI, doña Letizia pasó a ser Reina consorte y desde entonces dedica gran parte de su quehacer diario en causas sociales. Principalmente, en mejorar la vida de las personas con cáncer, con enfermedades raras, pero también se preocupa por las personas con discapacidad, las víctimas de la violencia de género, los niños y las prostitutas. Tiene una fluida relación con organizaciones que trabajan en estos sectores y colabora siempre que se la reclama. Se prepara concienzudamente las reuniones y se interesa por todas las cuestiones que le trasladan, según cuentan algunas de estas organizaciones.
El próximo lunes los Reyes se trasladarán hasta Londres para participar en el funeral de Isabel II, en el avión viajarán con la reina Sofía y allí estará también don Juan Carlos, que aceptó la invitación del Ministerio de Asuntos Exteriores británico para acudir al acto. Aún no se sabe si sentarán cerca o lejos porque es una decisión del protocolo de la Casa Real británica.
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