MADRID, 02 (SERVIMEDIA)
La Red de Alertas y Cooperación europea reportó un total de 7.515 notificaciones en 2022, la mayoría de ellas (990) relacionadas con la presencia de residuos de pesticidas en frutas y verduras.
Así lo refleja el ‘Informe Anual 2022’ de dicha red, compuesta por los miembros de la red del Sistema de Alerta Rápida para Alimentos y Piensos (Rasff), la red de Asistencia Administrativa y Cooperación (AAC) y la Red de Fraude Agroalimentario (FFN), que fue publicado hace unos días por la Comisión Europea.
En concreto, el número de notificaciones trasmitidas a través del Rasff fue de 4.361, todas ellas relacionadas con alimentos o piensos y de las cuales la mayor parte fueron reportadas por España (159), Polonia (312), Países Bajos (257), Francia (226) y Alemania (173).
A esto hay que sumar 2.554 notificaciones de la red AAC o incumplimientos de la legislación de la cadena agroalimentaria de la Unión Europea que “no presentaban un riesgo para la salud” y 600 casos de “sospechas de fraude”.
El mayor número de notificaciones (990) estuvo relacionado con residuos de pesticidas en frutas y verduras, si bien esta cifra representó una “marcada caída” del 20% con respecto al año 2021, según precisó la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (Aesan), que explicó que este informe anual incluye toda la información compartida durante el ejercicio 2022 a través del iRASFF, aplicación en línea mediante la cual los 32 países miembros del Rasff pueden transmitir nuevas notificaciones sobre productos que “representen un riesgo para la salud” o “dar seguimiento” a notificaciones transmitidas por otros miembros.
A través de este sistema se reciben notificaciones relativas a los riesgos derivados de los alimentos, de los materiales en contacto con alimentos o piensos que suponen un riesgo para la salud animal o el medioambiente, notificaciones de incumplimiento relativas a alimentos, a los materiales en contacto con alimentos o los piensos que no presentan un riesgo para salud y notificaciones de fraude.
BROTE DE SALMONELLA
El informe hace referencia al brote de Salmonella Typhimurium monofásica originado en productos de chocolate fabricados en una planta de procesamiento en Bélgica que se distribuyeron a 99 países y que, para finales de junio de 2022, sumaba más de 300 casos detectados en Austria, Bélgica, Chequia, Francia, Dinamarca, Alemania, Irlanda, Italia, España, Eslovenia, Suecia, Países Bajos, Noruega, Luxemburgo, el Reino Unido y los Estados Unidos y relacionados con dos cepas distintas.
Según el documento, la “mayoría” de los casos fueron niños y una “alta proporción” de ellos fueron hospitalizados, si bien el cierre de la planta belga y la retirada de todos sus productos “redujeron el riesgo de exposición”.
“Sin embargo, algunos casos no pudieron explicarse por el consumo de productos de chocolate como los fabricados en la planta belga, lo que sugiere que también puede haber otras fuentes de infección”, sentenciaron los expertos.
Por lo que respecta a las alertas relacionadas con material en contacto con alimentos, la mayoría de las notificaciones (152) se referían a material en contacto con alimentos procedente de China. En cuanto a los países notificantes, el principal Estado miembro que informó fue España (34), seguido de Polonia (26) e Irlanda (20).
FRAUDES
En cuanto a notificaciones de fraude agroalimentario, en el caso de los productos de la UE, el 15,4% de los casos correspondieron a España, principalmente por sospechas de adulteración de productos de calamar, seguido por el etiquetado incorrecto del aceite de oliva como aceite de oliva virgen extra.
Por lo que se refiere a sospechas de fraude en Indicaciones Geográficas, en el transcurso de 2022 se recibieron 37 casos con “elementos de sospecha de fraude”, el 54% reportados desde Italia, seguida de Alemania y España.
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