MADRID, 16 (EUROPA PRESS)
La Policía de Kenia ha disuelto con gases lacrimógenos a los manifestantes que participan este martes en una nueva jornada de protestas en varias ciudades contra el presidente William Ruto, quien en un intento por contenerlas renunció a su reforma fiscal y cesó a casi la totalidad de su gabinete la semana pasada.
Se han registrado protestas en al menos una decena de ciudades, entre ellas Mombasa, Migori, Kisumu y Nairobi, cuyas calles han amanecido desiertas, más allá de la fuerte presencia policial y los manifestantes; con negocios cerrados, después de que en anteriores movilizaciones se produjeran saqueos y destrozos importantes.
Las principales vías de comunicación que conducen al Parlamento, al Ayuntamiento de Nairobi y al Tribunal Supremo han sido bloqueadas por la Policía a fin de evitar que se produjeran incidentes violentos como los que se registraron el pasado 25 de junio, con manifestantes irrumpiendo en la sede del poder popular.
Si bien menos multitudinarias que en semanas anteriores, en ciudades como Kitengela y Katarina, los manifestantes han levantado pequeñas barricadas y han obstaculizado carreteras. Asimismo, han exhibido balas reales supuestamente disparadas por los antidisturbios, según recogen medios locales.
Este martes se cumplen cuatro semanas desde que comenzaron las protestas contra la polémica reforma fiscal del presidente Ruto, a quien le exigen que rinda cuentas por las desapariciones y decenas de muertes que se produjeron por la represión policial durante aquellas movilizaciones.
La Comisión Nacional de Derechos Humanos de Kenia estima que 50 personas, la gran mayoría de ellas en Nairobi, murieron a manos de los agentes que reprimieron las protestas aquellos días, mientras que más de 400 resultaron heridas.
Mientras tanto, la Policía ha vuelto a alertar este martes de la presencia de supuestos “grupos criminales” en las movilizaciones, instando a quienes se manifiesten a que lo hagan de manera pacífica y cooperen siempre con los agentes y garantizar así su propia seguridad, dice en un comunicado.
Las fuertes protestas de hace unas semanas provocó que finalmente Ruto tuviera que descartar un plan económico con el que preveía recaudar hasta 346.000 millones de chelines (2.400 millones de dólares), si bien los manifestantes denunciaron que sería a costa de sus bolsillos, mientras la corrupción campa a sus anchas.
Desde entonces, la agitación se ha transformado en un movimiento, encabezado principalmente por jóvenes, que exige una revisión total del modo en el que se ha venido gobernando. A pesar de que Ruto ha cedido al clamor popular y ha destituido a casi todo su gabinete y al jefe de Policía, las protestas buscan su dimisión.
- Te recomendamos -