MADRID, 15 (SERVIMEDIA)
Foment del Treball planteó este lunes a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) que regule y limite las posiciones “especulativas” de minoristas con un máximo de operaciones porque “si no se actúa de este modo se afecta sobre un valor irreal con unos intereses a corto plazo”. La analista Gotham City obtuvo beneficio de las posiciones en corto que tenía en Grifols, a la que acusó de manipular sus cuentas provocando un desplome de hasta el 40% del valor de sus acciones.
La patronal salió en defensa de la farmacéutica catalana señalando que “a veces derivado de especulaciones al mercado, no necesariamente por informaciones contrastadas, se puede perjudicar la trayectoria de empresas productivas y el despliegue de sus inversiones”.
Así, los esfuerzos empresariales se verían “reorientados para contener riesgos y situaciones de mercado, en lugar de dirigirse a desarrollar inversiones estratégicas, que en otros casos podrían haberse dado y que en determinadas circunstancias se ven aplazados hasta que se resuelva dicha situación”.
En el contexto actual, Foment entiende que el caso de la compañía Grifols es un ejemplo, pues se trata de una empresa “líder en innovación y con unos activos considerados estratégicos, no solo en Cataluña, si no a nivel mundial”. Así, las administraciones “tendrían que velar por la defensa de los intereses de los sectores estratégicos y de sus mercados”.
Para la patronal, regular estas posiciones en operaciones bajistas servirá para “evitar especulaciones sobre la economía productiva”. Foment recordó su propuesta de hacer un tratamiento diferencial en positivo de las inversiones a largo plazo por encima de las de corto plazo, como serían, por ejemplo, los beneficios no distribuidos.
Además, la patronal catalana subrayó su “preocupación” por la economía especulativa cuando ésta “solo busca ganancias que se puedan derivar del engaño, la desinformación, o el beneficio derivado de informaciones interesadas para jugar en posiciones en corto”. “Se podría provocar inestabilidad en los mercados que solo se sustentarían en este interés especulativo contrario a la buena fe y a unos mercados de capitales mejor organizados”, recalcó.
Foment lamentó que, ante sospechas de un tercero, que pueden provocarse “por parte de un tercero a veces de forma interesada”, puede haber “una sobrereacción en los mercados ante esta, que no se corresponden con la realidad de la empresa que pueda ser afectada”.
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