MADRID, 11 (EUROPA PRESS)
La portavoz de la Oficina del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Ravina Shamdasani, ha dicho este martes sentirse “alarmada” por el deterioro de la situación de los Derechos Humanos en China tras la condena impuesta el sábado contra cinco adolescentes, cuatro de ellos menores de edad, por protestar contra el Gobierno.
En un comunicado, ha lamentado que los cinco hallan sido condenados en el marco de la Ley de Seguridad Nacional de Hong Kong, que ha sido duramente criticada por la oposición y voces contrarias a Pekín por considerar que vulnera las libertades y derechos de la población hongkonesa.
“Hemos expresado en varias ocasiones nuestra preocupación por el impacto negativo que acarrea la Ley de Seguridad Nacional sobre las libertades fundamentales en la región. Recordamos a las autoridades sus obligaciones en el marco del Derecho Internacional, especialmente en relación con el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos y la Convención de los Derechos del Niño”, ha indicado.
Asimismo, ha puntualizado que el “arresto, la detención o el encarcelamiento de menores debe llevarse a cabo de acuerdo con lo establecido por la ley y debe ser utilizado únicamente como medida de último recurso y por un periodo limitado de tiempo”.
El Comité de Derechos Humanos de la ONU, que supervisa la implementación del convenio, instó en julio al Gobierno a “tomar medidas concretas para retirar la Ley de Seguridad Nacional y, en última instancia, evitar su aplicación”.
“Instamos a las autoridades a lograr que la legislación de Hong Kong cumpla con las obligaciones del país en materia de Derecho Internacional”, ha aseverado.
Los cinco adolescentes, que han sido condenados a tres años de correccional, pertenecían a un grupo conocido como El Retorno de los Valientes y tenían entre 15 y 18 años cuando comenzaron los procedimientos bajo las órdenes del magistrado Kwok Wai Kin.
Este sábado, el juez ha ordenado que los cinco condenados se pasen los tres próximos años en un centro de entrenamiento vocacional en una institución penal, según el veredicto al que ha tenido acceso el diario ‘South China Morning Post’.
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