MADRID, 27 (EUROPA PRESS)
La organización Salvamento Marítimo Humanitario (SMH), que se encuentra detrás de buques de rescate que operan en el Mediterráneo, como el ‘Aita Mari’, ha alertado de que este tipo de operaciones se encuentran en peligro tras las elecciones celebradas en Italia.
El presidente de la ONG, Iñigo Mijangos, ha mostrado su preocupación y ha señalado que la configuración del nuevo Gobierno italiano podría provocar que los barcos de rescate “lo tengan mucho más complicado para salvar vidas”.
Así, ha recordado que el programa de Hermanos de Italia propone “luchas contra las actividades de las ONG que favorecen la migración clandestina”, algo que podría atribuir a barcos como el ‘Aita Mari’ y que, en su opinión, es “rotundamente falso”.
“Esto se utiliza para criminalizar nuestro trabajo. Un trabajo que es obligación de los gobiernos europeos, según las leyes internacionales”, ha aseverado antes de reconocer que los últimos años de trabajo han sido difíciles. “Ahora mismo hay cuatro miembros de la tripulación del barco ‘Iuventa’ que se enfrentan a 20 años de cárcel tras ser acusados de tráfico de personas cuando han salvado 14.000 vidas”, ha puntualizado.
Por otra parte, ha recordado que el barco alemán ‘Sea Watch 3’ fue bloqueado la semana pasada en Italia “sin ningún tipo de justificación”. En este sentido, ha resaltado que la ONG teme que el nuevo gobierno impida la entrada a puerto de las personas rescatadas, “algo que contravendría la legislación internacional, que obliga a trasladar a los náufragos a un puerto seguro”.
“En la última misión tardaron nueve días en darnos puerto. Una estrategia que solo pretende desgastar a las ONG y que provoca un sufrimiento extra que no merecen las personas que llevan meses o años sufriendo todo tipo de vulneraciones en sus largas rutas migratorias y que se ven obligadas a permanecer más de una semana en condiciones muy difíciles y duras en los barcos”, ha sostenido.
Asimismo, ha hecho un llamamiento al resto de gobiernos europeos y en especial al español ante su inminente salida al Mediterráneo central el próximo mes de octubre: “Es imprescindible que los gobiernos europeos se unan para proteger a los barcos de rescate y les faciliten su labor en vez de obstaculizarla y criminalizarla”.
“Ante las posibles complicaciones que puedan surgir, esperamos tener el apoyo del Gobierno español en la novena misión de Aita Mari que tendrá lugar en breves semanas y que solo pretende defender el derecho a la vida de todas las personas”, ha zanjado.
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