MADRID, 25 (EUROPA PRESS)
La Fundación Madrina ha denunciado que las tarjetas o vales canjeables de comida que entregará el Gobierno a familias en situación de vulnerabilidad, y que sustituirán a las cestas de alimentos, serán “insuficientes” para garantizar la “supervivencia” de los hogares en situación de pobreza, ante el aumento de los precios de los alimentos.
“A partir de diciembre 2023 las familias vulnerables ya no contarán con las entrega de cestas de alimentos; la falta de recursos económicos y el deseo que desaparezcan las ‘colas del hambre’ como fracaso del sistema de protección social, hará que sean cambiadas por tarjetas o vales de comida”, ha señalado la fundación en un comunicado.
En concreto, Madrina se refiere al Programa de Asistencia Material Básica del FSE+ 2021-2027, administrado por el Ministerio de Trabajo y Economía Social, en coordinación con el Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030 por el que se opta por una modalidad indirecta de provisión de la ayuda mediante un sistema único de tarjetas o vales para que las personas puedan “elegir los artículos de su preferencia” y “evitar la estigmatización”.
Al mismo tiempo, se señala que los servicios sociales de las comunidades autónomas, las entidades locales y las ONG continuarán proporcionando ayuda, al margen del Programa BÁSICO de FSE+, a través de otros medios. “Cargarán sobre las fundaciones privadas la injusticia social de la no cobertura universal del derecho a la alimentación por parte de los más vulnerables”, critica Madrina.
Sobre el valor de la ayuda, este se ha fijado teniendo en cuenta que 100 euros supone el 62% del gasto medio por persona en España en alimentos y bebidas no alcohólicas en 2021. Si bien, Madrina advierte de que “el valor sobre el que han calculado las ayudas a las familias en extrema pobreza será insuficiente para la supervivencia de las familias”.
Así, precisa que “para una familia con cinco o más miembros, el gasto mensual en comida superó el doble o triple de los 220 euros indicados por la administración” y añade que son datos de 2021 “obsoletos” pues “desde entonces algunos alimentos han subido hasta un 40 ó 50%”.
Por otra parte, Madrina denuncia que “este año informan que no se reparte cereales, ni leche, ni aceite a las familias vulnerables, por no llegar a la licitación” y que “se ha reducido la entrega de alimentos a pesar de que ha aumentado la necesidad y las familias vulnerables, debido al mantenimiento año tras año del mismo presupuesto”.
En este contexto, la fundación muestra su “preocupación” por el incremento de la pobreza materno infantil y por la “dificultad de acceso a la sanidad pública con menores con más riesgo a padecer patologías al nacer de a madres malnutridas y sin seguimiento ginecológico”.
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