MADRID, 6 (EUROPA PRESS)
La galería londinense Stuart Lochhead expone uno de los tres retratos que Diego Velázquez realizó a la madre Jerónima de la Fuente en la feria de arte TEFAF de Maastricht, aunque fuentes del Ministerio de Cultura han asegurado a Europa Press que el cuadro no está a la venta.
Así, explican que se trata de una pieza que tiene un certificado de exportación temporal, por lo que se ha sacado de España –donde tiene un propietario privado– pero cuando acabe la exposición, deberá volver.
En caso de que el propietario quisiera vender ‘Retrato de la madre Jerónima de la Fuente’, tendría que pedir autorización al departamento dirigido por Ernest Urtasun, que también tendrá que valorar la situación en caso de que un nuevo comprador quisiera sacar el lienzo de España.
Esta pieza forma parte de la exhibición ‘Velázquez + Michelangelo. Early Modern Women: Devotion, Inspiration, and Global Travel, que la galería ha organizado para la feria, en la que únicamente estará este cuadro de Velázquez y un molde de un crucifijo de bronce, ‘Cristo en la Cruz’, de Miguel Ángel, según ha confirmado la galería en un comunicado al que ha tenido acceso Europa Press.
El ‘Retrato de la madre Jerónima de la Fuente’ es uno de los primeros retratos a escala real concebidos por Velázquez a la monja Jerónima, conocida en la España barroca por su devoción, su penitencia y sus viajes por todo el mundo: zarpando de Cádiz, atravesó el Atlántico para fundar un convento en Manila, el primero en Extremo Oriente. En el cuadro, la protagonista se muestra de pie sobre un fondo oscuro y mira directamente al espectador.
Por otro lado, ‘Cristo en la Cruz’, de Miguel Ángel, es una pieza que se redescubrió en el año 2023. El molde refleja el crucifijo que sostiene en su mano derecha la Madre Jerónima de la Fuente.
La galería explica que se trata de un molde del crucifijo de bronce de Miguel Ángel que llegó a Sevilla en 1597 y en el que se representaba a Cristo crucificado con cuatro clavos, que con el tiempo se convirtió en el modelo estándar para la representación de la crucifixión en toda la España barroca y sus colonias.
“La presentación conjunta de estas obras pretende tejer una narrativa que vaya más allá de lo familiar, buscando conexiones originales entre artistas, mecenas y objetos. Al redescubrir estos hilos, no sólo ampliamos la historia de cada obra, sino que también las unimos en un diálogo que trasciende el tiempo, la geografía y el espacio y el contexto. Es un privilegio único poder hacerlo centrándonos en dos obras maestras indiscutibles”, ha explicado la galería.
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