MADRID, 19 (SERVIMEDIA)
Representantes del PSOE, PP, Vox y Sumar centraron en la continuidad de las centrales nucleares un debate que tuvo lugar este miércoles sobre las propuestas de política energética para las elecciones del próximo domingo, 23 de julio.
El primero en hablar de este asunto en el debate, organizado por ‘El Periódico de la Energía’, fue el diputado del PP Guillermo Mariscal, quien recordó que en el programa de su formación se incluye la propuesta de ampliar el uso de estas instalaciones más allá de 2035, tal y como se recoge en el acuerdo suscrito por el Gobierno con los operadores de las centrales.
“El acuerdo de Teresa Ribera con los agentes nucleares es erróneo”, afirmó Mariscal, quien advirtió que cerrar los siete reactores en siete años provocará “un incremento de las emisiones y un sobrecoste inasumibles”.
En esta línea, defendió que “la garantía de suministro debe jugar un papel esencial” por lo que debe ser “un vector fundamental de las políticas energéticas”.
También se mostró favorable a ampliar la vida de las nucleares la diputada de Vox Mireia Borrás, quien situó a esta energía como una de las claves para la soberanía energética del país y recordó que la alternativa es el gas.
“Es muy necesaria la tecnología nuclear”, añadió Borrás, quien pidió “desintoxicar el fanatismo climático que inunda la política energética actual y perjudica mucho a la economía”.
EN CONTRA PSOE Y SUMAR
Por su parte, el secretario federal de Transición ecológica del PSOE, Marc Pons, defendió que España se debe centrar en el desarrollo de las renovables y rechazó la ampliación de las nucleares ya que su coste debería ser asumido por los contribuyentes, puesto que las empresas han dejado claro que “si tengo que pagarlo yo, yo no juego”.
“Hacerlo a costa del contribuyente es un error enorme cuando tenemos capacidad de producir nuestra propia energía”, prosiguió Pons, quien destacó que “somos ricos en sol y viento y en costos y tenemos una densidad de población que nos permite una posición privilegiada en Europa y en el mundo”.
Además, señaló que si se cumplen los objetivos del Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (Pniec), que calificó como “ambiciosos y realistas”, es compatible el cierre de las nucleares entre 2027 y 2035 con la transición a las renovables.
En la misma línea, Fernando Ferrando, presidente de la Fundación Renovables y coordinador del programa de Sumar en materia energética , abogó por “apostar 100% por las renovables y por la electrificación de la demanda”.
En cuanto a las nucleares abogó por mantener los acuerdos establecidos por evitar problemas legales pero rechazó ampliar su vida útil porque supondría restar impulso al desarrollo renovable.
Por último, defendió que “no es una cuestión de ideología, es de coste porque la energía más barata se produce con renovables”. De hecho, afirmó que “la nuclear es una hipoteca” para un país que no tiene procesado ni combustible nuclear.
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