MADRID, 31 (SERVIMEDIA)
Tener un plan de digitalización puede mejorar la estrategia de las entidades sociales, por lo que ganarán en eficacia. Las nuevas tecnologías lograrán que estas instituciones sean capaces de atender mejor a las personas que utilizan sus servicios, según los especialistas reunidos en el ‘Congreso de Transformación Digital del Tercer Sector de Cataluña’
Así se puso de manifiesto en dicho encuentro, organizado por la Fundación Telefónica y la Taula d’entitats del Tercer Sector Social de Catalunya, para reflexionar sobre las estrategias digitales de las entidades sociales y ayudarlas a aprovechar todo el potencial que les ofrece la transformación tecnológica.
Más del 44% de las 27.000 entidades sociales españolas, que atienden a casi 13 millones de personas, no tiene en mente invertir en nuevas tecnologías para mejorar su funcionamiento, y un 19 % de ellas no se plantea incluir un plan de digitalización a largo plazo, según el ‘Libro Blanco de la Transformación Digital del Tercer Sector’, editado por Fundación Telefónica.
Para Carlos Palacios, responsable global de Acción Social y Voluntariado de Fundación Telefónica, el problema de las entidades sociales que no se modernizan tecnológicamente es que no se benefician de ventajas como “hacer más eficaces sus procesos”.
“La mitad de las entidades sociales no invierten más de 1.000 euros al año en su transformación digital: afrontan un gasto en tecnología, pero no están haciendo un planteamiento serio de inversión a corto plazo que logre una mayor rentabilidad de los recursos económicos y humanos”, explicó Palacios.
Sobre cuál sería la aportación mínima a la inversión anual de una entidad pequeña para mejorar la digitalización, afirmó que “puede ser desde 10.000 euros hasta millones”. Y añadió que “el ‘Big Data’ y, sobre todo, la Inteligencia Artificial (IA), puede ayudar a las entidades sociales desde un punto de vista de la estrategia digital”.
LAS HERRAMIENTAS BÁSICAS QUE IMPULSAN LA DIGITALIZACIÓN DE LAS ENTIDADES SOCIALES
En cuanto a las herramientas básicas que toda entidad social debería tener, Palacios recomienda invertir en ciberseguridad “para preservar los datos de las personas vulnerables”; además, aconseja herramientas de IA para “mejorar algunos de los procesos internos”. Otra prioridad es la digitalización de la comunicación y relación con los socios o voluntarios, además de implantar programas de digitalización del marketing de la marca “para llegar a un público mayor, tanto de usuarios, como de donantes, socios o voluntarios”.
Por otra parte, destacó que la digitalización “no es un sustitutivo de la atención a las personas”, pero es una herramienta que ayuda a agilizar algunos procesos. Por ejemplo, habló de aspectos que se pueden automatizar, como “predecir algunas situaciones de los colectivos vulnerables” o mejorar algunos procesos que, al ser automatizados, serán más rápidos “lo que mejoraría la mejor calidad de vida de las personas”.
TECNOLOGÍA PARA LA COHESIÓN SOCIAL
El mensaje de Xavier Trabado, referente de m4Social en la junta directiva de la Taula d’entitats del Tercer Sector Social de Catalunya, es que la digitalización de las ONG y otras entidades sociales “sirve para la cohesión social”.
Esto significa derribar barreras y borrar brechas sociales, algo que se ha visto reflejado recientemente con la imposibilidad de muchas personas de acceder al Ingreso Mínimo Vital ante la dificultad de su procedimiento administrativo.
“Como sociedad tenemos que hacer un esfuerzo para conseguir esa cohesión y el Tercer Sector pone su granito de arena con los recursos tecnológicos que obtiene de la Administración para gestionar sus actividades sociales”, recalcó Trabado.
Para lograrlo, la idea es hacer “proyectos conjuntos”, pero que también sean flexibles y adaptables a las necesidades de cada entidad. Por ejemplo, disponer de una tecnología capaz de coordinar a las federaciones de asociaciones para recoger información de estas entidades o para comunicar eventos o actos de formación.
“Nosotros atendemos a personas en riesgo, que también sufren una brecha digital, una problemática adicional, ya que tienen pocos recursos para conectarse a Internet y formarse”. Por ello, deben adaptar sus procesos de digitalización a su público objetivo “y ser muy conscientes de que los tenemos que hacer muy accesibles”.
COMBINAR LO DIGITAL Y PRESENCIAL
Antonio Llorente, director general de La Rueca Asociación, también participante del Congreso de Transformación Digital del Tercer Sector de Cataluña, compartió su experiencia con su proyecto de digitalización que se lanzó en Internet, casualmente durante la pandemia. Ello provocó una gran demanda de consultas y servicios digitales en la web de ‘La Rueca’, que ofrece programas de formación y acompañamiento a personas en riesgo de exclusión mediante tecnología social.
“Se generó una avalancha mundial en una treintena países, pero nuestro ámbito era España, concretamente la Comunidad de Madrid, que es donde realmente tenemos los recursos”. Al final, estaban operando en toda Hispanoamérica, sobre todo en México, al “estar abiertos 24 horas los siete días de la semana”, dado su carácter digital. “Por la noche era increíble, hasta que tuvimos que decidir reconducir la actividad que venía desde Hispanoamérica.”
El aprendizaje de todo ello, según Llorente, es que lo digital complementa la atención presencial, pero que nunca debe sustituirse totalmente. Y también aprovechó para lanzar un mensaje a los directivos de las entidades sociales, para que no sean ellos los que se opongan a las innovaciones tecnológicas al mostrar una “resistencia al cambio”.
Como conclusión, este Congreso ha servido para detectar lo que necesitan las ONG y otras entidades sociales para su “puesta a punto” digital. “Lo que nos enseña a nosotros como fundación, a nosotros como Telefónica, es a entender cuáles son las necesidades y la situación actual de dichas entidades para poder aportarles soluciones a su desarrollo”, remarcó Carlos Palacios.
- Te recomendamos -