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La Cultura destinará 7,2 millones para comprar la Casa Gomis y transformarla en un centro que vincule arte y naturaleza

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MADRID, 07 (SERVIMEDIA)

El ministro de Cultura, Ernest Urtasun, anunció este martes que su departamento adquirirá la denominada Casa Gomis, radicada en El Prat de Llobregat (Barcelona), una vivienda de gran valor histórico-artístico perteneciente a la arquitectura racionalista del siglo XX, por un importe de 7.249.077,26 euros, con el objetivo de convertirla en un centro cultural que “gire en torno al diálogo entre arte y naturaleza”.

Lo anunció en una rueda de prensa celebrada en la antedicha Casa Gomis en la que estuvo acompañado por la consejera de Cultura de la Generalitat de Cataluña, Sònia Hernàndez, y el alcalde de El Prat de Llobregat, Lluís Mijoler, “dos instituciones íntimamente ligadas a la historia y a la protección de este inmueble con las que queremos colaborar de cara al uso y a la gestión de la Casa Gomis”, y a miembros de la familia Gomis Bertrando, propietarios de la casa, situada en primera línea de costa en el paraje natural de La Ricarda, en el Delta del Llobregat, un entorno de alto valor ecológico protegido por la UE.

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Urtasun confirmó que “este tesoro de la arquitectura racionalista del siglo XX formará parte a partir de hoy del patrimonio público” con el propósito de “protegerlo, conservarlo y convertirlo en un gran centro cultural 100% abierto al público”.

En ese sentido, comentó que el propósito de Cultura es convertir la Casa Gomis en un “nuevo centro cultural” que “gire en torno al diálogo entre arte y naturaleza”, ya que esta edificación es “uno de los grandes ejemplos arquitectónicos que tenemos en Cataluña de simbiosis perfecta con el entorno natural”.

El ministro expuso que “de la misma manera que la Casa Gomis fue un espacio para los debates de vanguardia en los años 60, ahora en 2025 queremos ponerla también al servicio del gran debate de vanguardia que existe actualmente, que es de la relación entre arte y clima”.

Hasta la fecha la casa se podía visitar puntualmente y recientemente ha formado parte de la oferta cultural de Manifesta 15, la bienal europea de arte nómada que en 2024 se celebró en Barcelona y su área metropolitana.

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Tras su adquisición, según el Ministerio de Cultura, el espacio se convertirá en un centro cultural abierto a toda la ciudadanía, que acogerá, entre otras actividades, encuentros y visitas guiadas. También se trabajará para que la Casa Gomis tenga un “papel destacado” en la programación de Barcelona como capital mundial de la arquitectura en 2026 y en el Congreso Mundial de Arquitectura de la Unión Internacional de Arquitectos (UIA), que también acogerá la Ciudad Condal el año próximo.

La Casa Gomis es un “claro ejemplo de adaptación de un concepto arquitectónico abstracto a un lugar y un paisaje muy concreto” en el que “la simbiosis de la casa y el entorno se desarrolla a través de una construcción de una sola planta bajo la copa de los pinos” y en el que “la transición entre el paisaje natural del resto de la finca y la zona central apropiada por la casa se consigue mediante una gran plataforma horizontal que acoge el jardín, tratado con gran sobriedad mediante pradera de césped, caminos y áreas pavimentadas de líneas ortogonales que prolongan la estructura de la edificación y un estanque piscina que refleja su imagen”.

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Otra de las “singularidades” del espacio es que tras seis décadas de uso “se mantiene prácticamente intacto, conservando sus características originales, habiendo sido objeto de una cuidadosa restauración de las cubiertas y la carpintería exterior en 1997”. Del mismo modo, conserva su mobiliario, que diseñó en gran medida el arquitecto barcelonés Antoni Bonet Castellana, y que se incluye en el expediente de declaración como parte de su historia.

La vivienda fue un proyecto de Antoni Bonet Castellana para el matrimonio formado por Ricardo Gomis e Inés Bertrand entre 1949 y 1956 y fue construida entre 1957 y 1963. Fue declarada Bien Cultural de Interés Nacional (BCIN) en la categoría de Monumento Histórico por la Generalitat de Cataluña, la figura de más alta protección en el ordenamiento vigente en materia de patrimonio histórico en Cataluña, el 23 de marzo de 2021.


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