MADRID, 11 (SERVIMEDIA)
El consejero de Vivienda, Transportes e Infraestructuras de la Comunidad de Madrid, Jorge Rodrigo, visitó este viernes la promoción de viviendas del Plan Vive ubicada en la calle César Cort Botí, del distrito de Hortaleza, que cuenta con gimnasio, plazas de garaje, piscina, pádel, parque de juegos infantiles, sala de comunidad y zona de coworking.
“Junto a esta parcela que hemos conocido hoy, se sitúa otra igual con el mismo número de inmuebles, 166, cuyas obras también están a punto de concluir. A estas se suman otras 441 y 816 espacios de aparcamiento, que estarán listas en el primer trimestre de 2025”, recordó el consejero. “Nuestro objetivo es seguir incrementando la oferta de pisos en el mercado y, concretamente, en este barrio, que sigue en pleno desarrollo y crecimiento”, dijo.
Estas casas de la calle César Cort Botí 72-74, disponen de 66 hogares de un dormitorio, 68 de dos y 32 de tres, de las cuales el 8% están adaptadas a personas con movilidad reducida. La inversión del Ejecutivo autonómico para esta urbanización ha sido de 10,8 millones de euros.
“Estamos convencidos de que el Plan Vive es un modelo de gestión que funciona y que va a permitir poner a disposición de los madrileños, al final de esta legislatura, 10.500 viviendas nuevas en la región, de las que 2.000 estarán dirigidas a jóvenes de hasta 35 años”, aseguró Rodrigo.
Así, actualmente, 6.500 ya están en ejecución, 4.000 se van a concluir este mismo año, y ya se han entregado 483. Además, “en solo cuatro meses vamos a dar las llaves de 2.000 pisos en Getafe, Alcorcón, Torrejón de Ardoz, Alcalá de Henares, San Sebastián de los Reyes, y las de hoy en Valdebebas”, añadió el consejero.
Este programa de colaboración público privada supone un coste cero para el ciudadano. Promueve una inversión empresarial que supera los 1.000 millones de euros y contribuye a la creación de miles de empleos directos e indirectos, además de generar un importante retorno fiscal para las arcas públicas, razones por las que ya se han interesado por él administraciones de dentro y fuera de España.
Para acceder a estas viviendas existen unos requisitos mínimos, como disponer de la nacionalidad española, destinarla a residencia habitual, no contar con otra propiedad, y no dedicar más del 35% de los ingresos netos anuales de la unidad de convivencia al pago de la renta total. Asimismo, tendrán prioridad los empadronados o trabajadores del municipio donde se ubiquen
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