MADRID, 21 (SERVIMEDIA)
La nueva ministra de Igualdad, Ana Redondo, pidió este martes a la Delegada del Gobierno contra la Violencia de Género, Victoria Rosell, que fuera ella quien clausurara el acto institucional de entrega de los XX reconocimientos con motivo del 25N, Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres, porque era un acto que había preparado el equipo que dirigía Irene Montero, ya cesada.
Redondo enfatizó en el acto que se celebró en Madrid: “Voy a cambiar el guion. No voy a leer un discurso que no es mío. Este acto es el trabajo del anterior equipo del Ministerio de Igualdad” y por eso “prefiero que sea la Delegada del Gobierno quien clausure el acto”.
Después confesó que conoce “mucho a Viky porque hemos estudiado juntas” y con este ‘cambio de guión’ quiso demostrar que “el Ministerio de Igualdad es de todas y que todas somos eslabones de una cadena” que tiene que luchar “contra la extrema derecha, que donde gobierna con el PP pretende acabar con los derechos conseguidos. ¡No vamos a dar ni un paso atrás!”, aseveró, e invitó a todos los asistentes a acudir a la manifestación del próximo sábado 25 de noviembre.
Redondo actuó así unas horas después de que su antecesora en el cargo, Irene Montero, culpara en público en el acto de traspaso de carteras a Pedro Sánchez de su cese: “Nos ha echado por haber hecho lo que habíamos prometido hacer”, proclamó en alusión también a su compañera Ione Belarra, exministra de Derechos Sociales y Agenda 2030.
Por su parte, la delegada del Gobierno, visiblemente emocionada, recogió el guante, agradeció a la ministra su gesto y recordó los momentos más difíciles de Igualdad en los últimos cuatro años. “A los dos días de llegar nos encontramos con la pandemia, y el 016 tuvo que teletrabajar, luego la erupción del volcán de La Palma, y tuvimos que decir que a una mujer maltratada no se le podía meter en la casa de su maltratador y su familia, luego la guerra de Ucrania, las mujeres afganas…” Y al final destacó que “solo la perspectiva de género podrá hacer justicia”.
Entre los galardonados de este año que reconocen la lucha contra las violencias machistas desde distintos ámbitos está el Fiscal General del Estado, Álvaro García Ortiz, quien agradeció el trabajo de todas las fiscalas que luchan por erradicar la violencia de género.
Pero el premio más emotivo fue el concedido en la categoría de resiliencia a Nevenka Fernández García, la concejala del PP de Ponferrada (León) que sufrió todo tipo de abusos hace 22 años por parte del alcalde, Ismael Álvarez, también del PP.
La ‘menina’ se la entregó la ministra Redondo y Nevenka pidió “políticas valientes” como Irene Montero e instó a las mujeres que pasan por el mismo calvario que ella pasó a que lo denuncien, porque “solo si se cuentan los problemas se pueden resolver”.
PREMIADOS
Entre los premiados destacan la selección nacional de fútbol femenino; la ‘Plataforma Yo sí te creo’ constituida por madres protectoras, en la categoría movimiento social en defensa de la igualdad y contra la violencia de género; Loueila Sid Ahmed Ndiaye, saharaui residente en Canarias y abogada en materia de migraciones y extranjería; Vicky Luengo y Juan Carlos Fisher por su obra de teatro ‘Prima Facie’ sobre el consentimiento, las violencias sexuales y el sistema judicial; la Universidad de Málaga por su campaña ‘No lo dejes en visto’ contra las violencias machistas; las Unidades de Violencia y Unidades de Coordinación contra la violencia de género; y la periodista de EFE Violeta Molina.
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