MADRID, 09 (SERVIMEDIA)
La baronesa Carmen Thyssen ha enviado una carta de apoyo a la Plataforma contra la tala de robles centenarios en Tolbaños de Abajo (Burgos) en la que muestra su solidaridad con este pequeño pueblo que se opone a que acaben con una decena de estos árboles para arreglar una carretera. Además, más de 20.000 personas han firmado una petición en ‘change.org’ para salvar los robles.
En la misiva, fechada el 24 de junio, y a la que ha tenido acceso Servimedia, la baronesa señala que “es fundamental preservar el patrimonio natural” y apoya totalmente a la plataforma “en su planteamiento de buscar otras alternativas al trazado de la carretera” para salvar a los árboles porque si se lleva a cabo la tala “supondría una gran pérdida, ya que se trata de una arboleda histórica para la localidad y para el Valle de Valdelaguna”.
La tala, que afectaría a una decena de robles centenarios que pertenecen a Tolbaños de Abajo, se debe a unas obras para ensanchar y mejorar el asfaltado de la carretera que une las localidades de Tolbaños de Abajo con Huerta de Arriba y que ha provocado una reacción vecinal sin precedentes en una de las zonas más despobladas de España, según explicaron fuentes de la plataforma a esta agencia.
“Estamos a favor de mejorar la carretera, claro, como dice nuestro lema: ‘Carretera sí pero no así'”, añadieron. “Todavía estamos a tiempo de modificar el trazado del ensanchamiento de la carretera para preservar a los árboles porque aunque la obra está ya adjudicada aún no ha empezado”, manifestaron vecinos de la zona.
Esperan que la Diputación de Burgos, con la que ya se han reunido en alguna ocasión atienda finalmente sus peticiones, que hagan caso del informe realizado por la Fundación Oxígeno donde se plantea la posibilidad de llevar a cabo la obra de la carretera, sin afectar a los árboles, “salvo a dos que están huecos y que por seguridad será mejor talar y sin afectar significativamente al proyecto, ya que se sólo se verían afectados 600 metros de los 11 kilómetros que tiene el tramo” precisaron integrantes de la plataforma.
“Nuestro objetivo”, añaden, “es una carretera bien asfaltada, segura, duradera y respetuosa con el medio”. Para lograrlo, el próximo 11 de julio la plataforma volverán a manifestarse ante la Diputación de Burgos.
Ahora, estos vecinos confiesan estar “esperanzados” con el apoyo de la baronesa Thyssen, una defensora de los árboles que en el año 2007 intentó encadenarse a un castaño centenario en el centro de Madrid para que no lo cortaran y recientemente también ha apoyado a los vecinos de Madrid Río que se oponían a la tala de árboles en el parque de la Arganzuela por las obras de la línea 11 del Metro.
Aunque los tolbañeses saben que pelear contra la Administración “es una tarea dura”, se sienten “como los habitantes de la aldea gala de Obélix y Astérix. Somos pocos pero estamos decididos a salvar a nuestros robles” y en sus redes sociales aparece un mapa del célebre cómic que sitúa a este pueblo en el que apenas viven de forma permanente unas 50 personas.
DIPUTACIÓN
Por su parte, el vicepresidente de la Diputación de Burgos, Ramiro Ibáñez, explicó a Servimedia que “las obras en esa carretera tienen como fin mejorar la seguridad de los vecinos” y que fue una petición formulada por los alcaldes de la zona.
“Atendimos la petición de los alcaldes porque la carretera es estrecha. Pensamos ensancharla entre metro y metro y medio y arreglar todo el firme”, señaló Ibáñez . La petición fue elevada a la Junta de Castilla y León que dio el visto bueno al proyecto realizada por los técnicos, que es la que tiene sobre la mesa la Diputación de Burgos y que no convence a los vecinos de la zona por “la tala de nuestros árboles centenarios”.
Preguntado el vicepresidente de la Diputación de Burgos por las críticas al proyecto Ibáñez arguyó que en la zona en la que se va a intervenir no es espacio natural protegido” y que “no hay ningún árbol catalogado ni protegido”. Mientras que desde la plataforma aseguran que “la zona está protegida por la Red Natura 2000”.
Ibáñez expuso que su voluntad, que es la de la Junta de Castilla y León, “es que la tala sea mínima”, pero que “tenemos que actuar por la seguridad de las personas que viven en la zona y transitan por esa carretera”.
En principio eran 16 los robles centenarios que se iban a talar, pero ahora la Diputación se plantea talar ocho tras las presiones vecinales. “La Diputación de Burgos no puede ser más garantista, hemos sido escrupulosos con el procedimiento, hubo un periodo de consulta publica y nadie presentó ninguna alegación. Siempre hemos ido de la manos de los alcaldes de la zona, que hicieron la petición. Los vecinos empezaron a protestar cuando se marcaron los árboles”, destacó Ibáñez
Los vecinos, por su parte, dicen que “el trámite de información era para los expropiados no para alegaciones de carácter medioambiental que obliga la Ley de Evaluación Medioambiental” e instan a la Diputación a que tenga en cuenta el proyecto presentado por Fundación Oxígeno que “mantiene la posibilidad de obra sin talar ningún roble”.
La Plataforma espera que el próximo 11 de julio cuando se manifiesten ante la sede de la Diputación en la capital burgalesa, les inviten a entrar y a dialogar sobre las talas y “ojalá logremos que no se corte ningún roble centenario porque son patrimonio de la zona”, concluyeron.
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