MADRID, 25 (SERVIMEDIA)
Kiwoko destacó este martes la importancia de los antiparasitarios para evitar enfermedades transmitidas por pulgas, garrapatas y otros parásitos en perros y gatos, aunque señaló que en algunos casos pueden provocar reacciones alérgicas.
La directora técnica veterinaria de Kivet, la red de centros veterinarios de Kiwoko, Ana Ramírez, explicó que las alergias a estos productos son poco frecuentes, pero pueden presentarse en animales con piel sensible o predisposición a reacciones alérgicas. Los síntomas pueden incluir enrojecimiento, picor o caída del pelo en la zona de aplicación, mientras que los comprimidos podrían causar molestias digestivas, vómitos o diarrea. En casos raros, pueden surgir reacciones graves como hinchazón facial o dificultad respiratoria, indicó la experta.
Los antiparasitarios se presentan en distintos formatos: collares, pipetas, comprimidos y sprays. Cada uno tiene características específicas para minimizar riesgos en animales sensibles. Los collares ofrecen protección prolongada, las pipetas actúan durante unas cuatro semanas, los comprimidos tienen un efecto rápido y los sprays pueden utilizarse como refuerzo en tratamientos combinados, detalló Ramírez.
La combinación de varios métodos proporciona una protección más completa contra los parásitos. El uso de collares junto con pipetas o comprimidos ayuda a reducir la exposición a un solo principio activo en grandes cantidades. Sin embargo, los repelentes nunca deben sustituir a los antiparasitarios veterinarios, advirtió la especialista.
Ante una reacción alérgica, se recomienda retirar el producto, lavar la zona con agua y jabón neutro y observar la evolución del animal. Si los síntomas persisten o se agravan, es necesario acudir al veterinario para evaluar alternativas. En el caso de los comprimidos, identificar el principio activo permitirá optar por otra opción en el futuro, informó Kiwoko.
Las alergias pueden afectar tanto la piel como el sistema digestivo o respiratorio. Para evitar riesgos, la elección del antiparasitario debe realizarse con asesoramiento veterinario y un seguimiento adecuado, concluyó Ramírez.
Si un antiparasitario provoca una reacción adversa, se recomienda retirar el producto, lavar la zona con abundante agua y jabón neutro y observar al animal. Si los síntomas persisten o empeoran, es fundamental acudir al veterinario para valorar el tratamiento adecuado. Si la alergia se ha producido a un comprimido, es fundamental identificar el principio activo y optar por otra alternativa en el futuro.
Además, las alergias pueden ser tanto externas como internas. Mientras que las primeras afectan a la piel, las segundas pueden causar síntomas digestivos o respiratorios. “Mantener a los animales protegidos de los parásitos sin riesgos es posible con la elección correcta del antiparasitario y el seguimiento veterinario adecuado”, concluye Ramírez.
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