MADRID, 4 (EUROPA PRESS)
La compañía agroalimentaria estadounidense Kellogg registró en el segundo trimestre del año un beneficio neto atribuido de 326 millones de dólares (320 millones de euros), lo que representa una caída del 14,2 por ciento en relación al resultado contabilizado en el mismo periodo de 2021 por la empresa, que ha revisado al alza sus expectativas anuales.
Las ventas neta de Kellogg entre abril y junio sumaron 3.864 millones de dólares (3.799 millones de euros), un 8,7 por ciento más que en el segundo trimestre de 2021.
Las ventas de la multinacional aumentaron en el segundo trimestre un doce por ciento en Norteamérica y un ocho por ciento en Latinoamérica, así como un 11 por ciento en Asia Pacífico, mientras que en Europa disminuyeron un tres por ciento.
“Nuestro desempeño en el segundo trimestre volvió a demostrar la solidez de nuestra cartera a través de un entorno de suministro y costes inusualmente desafiante”, dijo Steve Cahillane, presidente y consejero delegado de Kellogg.
De este modo, en los seis primeros meses del año la multinacional obtuvo un beneficio neto atribuido de 748 millones de dólares (735 millones de euros), en línea con el resultado de la primera mitad de 2021. Las ventas de Kellogg hasta junio aumentaron un 5,6 por ciento, hasta 7.536 millones de dólares (7.410 millones de euros).
Por otro lado, la empresa ha revisado sus previsiones anuales y ahora espera un crecimiento de las ventas netas del siete por ciento al ocho por ciento, cuando previamente esperaba cuatro por ciento, como reflejo de la mejor evolución en el primer semestre.
Asimismo, Kellogg ha revisado al alza su estimación de crecimiento de las ganancias por acción a aproximadamente el dos por ciento sin tener en cuenta los efectos del tipo de cambio, frente a la guía anterior de entre el uno por ciento y el dos por ciento.
“Nuestra perspectiva mejorada para todo el año incorpora no solo nuestros mejores resultados de lo esperado de la primera mitad, sino también la confianza en nuestra capacidad para continuar administrando los desafíos actuales de suministro y costes”, añadió Cahillane.
El pasado mes de junio, Kellogg confirmó su escisión en tres empresas cotizadas que operarán de manera independiente los negocios de aperitivos y cereales en el mercado internacional, así como los de cereales en Norteamérica y el de comida vegetariana.
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