Enrique Santiago afirma que no es la “mejor carta de presentación” para Juan Carlos I recurrir a la misma abogada que la pareja de Ayuso
MADRID, 2 (EUROPA PRESS)
El portavoz parlamentario de IU, Enrique Santiago, ha exigido al rey emérito Juan Carlos I que se abstenga de “acosar” judicialmente a personas como el expresidente cántabro Miguel Ángel Revilla, ya retirado de la política, cuando además goza de una “ultraprotección injustificada”, a su juicio, por parte del Poder Judicial del país ante las denuncias por presuntos delitos fiscales.
También ha lanzado que el monarca emérito está “mal aconsejado” en el plano político, pues no es la “mejor carta de presentación” tener como representación legal para su demanda a la abogada que representa a Alberto González Amador, la pareja de la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso, y que está imputado por presuntos delitos fiscales, corrupción en los negocios y administración desleal.
“El rey emérito debería tener un poquito de mesura atendiendo a esta situación de ultraprotección injustificada legalmente que le da el Poder Judicial en este país o los tribunales”, ha afirmado en rueda de prensa en el Congreso, cuestionado por la demanda a Revilla para exigirle 50.000 euros por unas declaraciones “injuriosas”. Una actitud que el expresidente autonómico ha calificado de “mezquina”.
Santiago ha opinado sobre esta polémica que, en primer lugar, Juan Carlos I “disfruta de demasiada impunidad” judicial al argumentar que cuando dejó el trono en 2014 ya no goza de inviolabilidad y ha sido denunciado en varias ocasiones por presuntos delitos fiscales, incluida una iniciativa que lanzó IU.
NO ESTÁ BIEN ACONSEJADO
Sin embargo, “sorprendentemente” siempre se ha dado una situación en los tribunales que “favorece su impunidad” al rechazar las denuncias que se dirigían contra él.
Por otro lado, le ha afeado que se querelle contra el expresidente cántabro, una persona que ya no juega un papel políticamente destacado en España.
Y finalmente ha contrapuesto que recurrir como su abogada a la letrada que representa al novio de Ayuso, al que se ha referido como “Alberto Quirón”, y que está salpicado por “serios problemas de corrupción” evidencia que el emérito no está bien asesorado.
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