MADRID, 29 (EUROPA PRESS)
El ministro de Exteriores de Irán, Hosein Amirabdolahian, ha afirmado este miércoles que no podrá participar en una reunión que celebrará hoy el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas sobre Palestina a causa de un retraso por parte de Estados Unidos a la hora de entregar los pertinentes visados a los miembros de la delegación iraní.
Amirabdolahian ha indicado que los visados han sido entregados a las 1.00 horas (hora local) de este miércoles, lo que imposibilita el traslado de la delegación iraní a la ciudad estadounidense de Nueva York, según ha informado la agencia de noticias Tasnim.
“El Gobierno de Estados Unidos ha emitido con retraso los visados para mí y el resto de la delegación iraní, lo que nos imposibilita participar en la reunión que celebrará hoy la ONU”, ha dicho, antes de volver a defender la necesidad de lograr un “alto el fuego” en Gaza.
“Se están llevando a cabo todo tipo de esfuerzos para prolongar el alto el fuego”, ha manifestado, al tiempo que ha hecho hincapié en que es el Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás) el que “debe decidir cómo actúa para mantener en pie el alto el fuego”.
En este sentido, ha destacado que “ahora hay una iniciativa sobre la mesa para sopesar cómo llegar a un alto el fuego permanente a cambio de la liberación de rehenes y de los presos palestinos en cárceles de Israel”, sin dar más detalles al respecto.
El Gobierno de Israel y Hamás pactaron la semana pasada una tregua temporal de cuatro días que entró en vigor el viernes y que fue prorrogada el lunes. La misma llega hoy a su fin, salvo que las partes logren pactar otra extensión, en medio de las peticiones internacionales para un alto el fuego, opción rechazada por las autoridades israelíes.
Israel lanzó una ofensiva contra el enclave palestino tras los ataques ejecutados el 7 de octubre por Hamás, que dejaron unos 1.200 muertos y cerca de 240 secuestrados. Las autoridades gazatíes, controladas por el grupo islamista, han cifrado en cerca de 15.000 los palestinos muertos, a los que se suman otros 230 a manos del Ejército israelí y por ataques de colonos en Cisjordania y Jerusalén Este.
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