La UE condena “en los términos más enérgicos” el uso de la pena capital “como respuesta a la disidencia interna”
MADRID, 6 (EUROPA PRESS)
Las autoridades de Irán han ejecutado este martes a un hombre de 34 años por matar a un coronel de la Guardia Revolucionaria de Irán durante las protestas antigubernamentales tras la muerte bajo custodia policial de la joven Mahsa Amini.
El hombre, identificado como Gholamreza Rasaei, fue arrestado en la provincia de Kermanshah y sentenciado a muerte en octubre de 2023, una condena ratificada posteriormente por el Tribunal Supremo, según ha informado el portal de noticias Mizan Online, vinculado con el aparato judicial del país.
Las autoridades iraníes acusaron a Rasaei de matar a la víctima, el coronel Nader Bayrami –quien estaba a cargo de una unidad de Inteligencia de la Guardia Revolucionaria en la ciudad de Sahneh en la citada provincia– con un cuchillo.
En respuesta, la directora general de Amnistía Internacional (AI) para Oriente Próximo y Norte de África, Diana Eltahawy, ha señalado en un comunicado que esto pone de manifiesto que el sistema judicial iraní “está podrido hasta la médula”.
De la misma forma, ha asegurado que las autoridades utilizan la pena de muerte “como herramienta de represión política para infundir miedo entre la población”. “También disipa cualquier ilusión de progreso en materia de Derechos Humanos con la llegada al poder de un nuevo presidente la semana pasada”, ha dicho.
En este sentido, Eltahawy ha subrayado que la ejecución “arbitraria” de manifestantes “ilustra una vez más que sin reformas constitucinales, legales y políticas, las violaciones de Derechos Humanos y la impunidad persistirán” en Irán.
CONDENA DE LA UE
Por otro lado, la Unión Europea ha condenado “en los términos más enérgicos” el uso de la pena capital –un “castigo cruel e inhumano” que representa una “negación inaceptable de la dignididad e integriddad humanas”–, “como respuesta a la disidencia interna”.
“La UE insta a las autoridades iraníes a que pongan fin inmediatamente a la práctica de imponer y ejecutar sentencias de muerte contra manifestantes, y pide una vez más a Irán que aplique una política coherente hacia la abolición total de la pena de muerte”, ha indicado en un comunicado el Servicio Europeo de Acción Exterior.
Asimismo, ha instado a las autoridades iraníes a “respetar” los derechos de los acusados durante los procesos judiciales y a “garantizar que aquellos bajo cualquier forma de detención o encarcelamiento no sean objeto de ningún tipo de maltrato”.
La joven kurdo-iraní Mahsa Amini murió bajo custodia policial tras ser detenida por no llevar bien puesto el velo. Su muerte generó una ola de protestas tanto en el país como en el exterior y provocó la condena de la mayor parte de la comunidad internacional.
- Te recomendamos -
