Bagdad dice que son “una violación” de su soberanía y pide no convertir el país en un terreno para “ajustes de cuentas”
MADRID, 22 (EUROPA PRESS)
El Gobierno de Irak ha condenado “firmemente” los recientes bombardeos por parte de Turquía e Irak contra la región semiautónoma del Kurdistán iraquí (norte), tras los ataques de los últimos días contra bases de grupos kurdos presentes en la zona.
El Ministerio de Exteriores iraquí ha indicado que “los repetidos ataques ejecutados por las fuerzas iraníes y turcas con misiles y drones contra la región del Kurdistán son una violación de la soberanía iraquí y un acto que contraviene las convenciones y leyes internacionales que regulan las relaciones entre los países”.
Así, ha señalado un comunicado publicado en su página web que estos bombardeos “también violan el principio de buena vecindad, que debería ser un motivo para buscar una seguridad participativa en servicio de todas las partes”.
“El Gobierno de Irak subraya que los territorios de Irak no son base ni pasillo para causar daño a ninguno de los países vecinos y rechaza que Irak sea un terreno para el conflicto y los ajustes de cuentas entre partes externas”, ha zanjado el Ministerio de Exteriores iraquí.
Las críticas de Bagdad llegan tras los últimos ataques por parte de la Guardia Revolucionaria iraní contra bases y sedes de grupos opositores kurdos y los bombardeos de Turquía contra el Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) en la citada región semiautónoma.
Las autoridades iraníes han acusado a grupos opositores kurdos de azuzar las recientes protestas en el país por la muerte de Amini, que han tenido su epicentro en la región del Kurdistán. Irán tiene unos siete millones de kurdos, lo que representa cerca de un diez por ciento de su población. La mayoría viven en la región de Kurdistán, situada en el noroeste del país, junto a la frontera con Irak.
Por su parte, Turquía ha realizado bombardeos desde hace meses contra bases del PKK en la zona y ha recrudecido su ofensiva tras el atentado perpetrado el 13 de noviembre en Estambul, que se saldó con seis muertos. Ankara ha acusado del suceso al grupo kurdo, que se ha desvinculado del mismo.
En este sentido, el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, advirtió el lunes del posible inicio de una operación terrestre en Siria e Irak para combatir al PKK y a la milicia kurdo-siria Unidades de Protección Popular (YPG), que mantiene lazos con el citado grupo y que es parte de las Fuerzas Democráticas Sirias (FDS).
- Te recomendamos -